Mi respuesta posiblemente es tardía porque, como es sabido, la denuncia que presentó la Asociación Dignidad y Justicia fue archivada por el juez hace ya algunos días. Es importante resaltar, en todo caso, que la denuncia no partió del Partido Popular sino de una asociación  que consideró el contenido ofensivo y humillante para las victimas del terrorismo. Coincido en que, desde el punto de vista de mi partido político el sketch resulta profundamente ofensivo, pero eso no implica delito alguno. La libertad de expresión, más aun cuando se ejerce dentro de la crítica política tiene, por fortuna, amplios margenes de actuación.

Por no terminar aquí aprovecho para introducir otro tema conexo de gran actualidad ¿deben existir límites a la libertad de expresión? Es claro que todos los ordenamientos, aun en los sistemas más democráticos y libres (tal vez por eso lo son), contemplan restricciones.La injuria y la calumnia son delito en todas partes, como lo es el enaltecimiento del terrorismo o la humillación de sus víctimas. Nuestro Código Penal, en línea con otros códigos europeos, tiene un capítulo dedicado a los delitos cometidos con ocasión del ejercicio de los derechos fundamentales y de las libertades públicas garantizados por la Constitución, haciendo referencia a "los que provocaren a la discriminación, al odio o a la violencia contra grupos o asociaciones, por motivos racistas, antisemitas u otros referentes a la ideología, religión o creencias, situación familiar, la pertenencia de sus miembros a una etnia o raza, su origen nacional, su sexo, orientación sexual, enfermedad o minusvalía". Es decir, la libertad de expresión debe tener unos límites, cuanto menores mejor, que deben servir para garantizar la convivencia democrática y el respeto pleno a las identidades o creencias ajenas.