Pregunta para Congreso de los diputados
La discapacidad debe abrazarse y no ser rechazada por no entenderla. ¿Por qué no se ofrece desde la infancia unos conocimientos básicos sobre la diversidad que mejoren la inclusión social?
Que invisible pude llegar a ser la discapacidad si no te toca de lleno a ti o tú entorno. En general, creemos reconocerla, pero la realidad es que sabemos muy poco de ella. ¿Qué significan los colores y trazos del bastón de un invidente?, ¿podrías comunicarte con una persona en braille o en lenguaje de signos?, ¿eres consciente de las barreras arquitectónicas a las que se enfrenta una persona con movilidad reducida?... Si has respondido negativamente, se demuestra que el desconocimiento sobre la diversidad es tan grande y tan estereotipado, que necesitamos que su realidad se conozca desde la infancia para saber cómo incluirla y no discriminarla.
Es por ello que lanzo esta petición, para que desde el sistema educativo se enseñen unos mínimos principios básicos de inclusión social que permitan la comunicación en lenguaje de signos, braille, o que se sepa reconocer cuándo un espacio (local, calle, edifico, playa…) está adaptado para facilitar el acceso a la movilidad reducida, así como en el sector servicios, ocio o laboral.
No es el simple hecho de saber que esta realidad existe, sino de interiorizar desde la infancia que la diversidad está ahí, que hay personas con capacidades y percepciones diferente a las consideradas `normativas´, y que se puede nacer con ellas o de repente formar parte de tú vida sin haberlo imaginado previamente como me sucedió a mi.
Yo, que pasé de ser una persona totalmente independiente que no paraba quieta y rescataba animales allá donde fuese, a tener que necesitar un bastón, muletas y un andador…hasta la silla de ruedas que utilizo actualmente. La aparición de una enfermedad me obligó a ver el mundo un metro más abajo de lo que estaba acostumbrada, de pasar a estar de pie, a tener que moverme sentada. Y con el funcionamiento completo de solo una extremidad, la dependencia se amplió, necesitando ayuda para vestirme, peinarme, prepararse el desayuno, hacer la comida, moverme o ir al baño.
En estos casos la vida da un cambio radical, porque no solo cambias tú, sino tú familia, tus amistades, tus circunstancias, y eso te afecta mucho a nivel emocional. Pero, si optas por seguir adelante la mente se abre, el poder de la adaptación impera, y descubres una realidad en la que el rechazo se hace más latente que nunca y necesitas quererlo cambiar.
Y para eso aporto mi granito de arena, para poder ayudar. Haciendo videos explicativos en Twitch en los que enseño como realizar artesanía adaptada, o formar parte de un grupo de whatsapp en el que crear red de apoyo, así como mostrar la diversidad en otras redes sociales, En todas ellas, he encontrado una gran comunidad en la que nos ayudamos y entendemos mejor que nadie.
Así, el mundo de la discapacidad me ha abierto mucho la mente, y me gustaría que esta perspectiva se tuviese ya desde la infancia para fomentar una sociedad inclusiva en la que no tengamos que estar poniendo reclamaciones constantemente para hacer valer nuestros derechos por tener habilidades diferentes.
Un futuro en el que se fomente la empatía, no la lastima ni la discriminación, y en el que se sea consciente que si la discapacidad aparece de repente, hay que saber recuperarse y sobrellevar las cicatrices, “pues son la belleza de la vida, el caer y volver a levantarse con más fuerza y con la lección aprendida. Porque un alma con cicatrices es en la que has vivido circunstancias difíciles y has aprendido de ellas”.
Las que te acaban convirtiendo en un auténtica #guerrerakintsugi