Uno se guía por recuerdos e impresiones. Me faltan actas, periódicos y más datos para contestar de manera más rigurosa, pero mi recuerdo es que fue una buena Consejera del Departamento y sobre todo leal al Estatuto y al lehendakari Ardanza.

Le recuerdo promocionando Euskadi con sus viajes acompañando a empresarios y con sus  llamativos sombreros. Recuerdo aquel buen slogan turístico, el mejor hasta ahora, que decía: VEN Y CUENTALO  en plena ofensiva de ETA. Recuerdo su polémica con Mingote que lo usó para ilustrar una de sus viñetas tras un atentado. La recuerdo haciendo política y protestando porque su partido dejaba el Gobierno vasco en 1998 a cuenta de que las elecciones estaban cerca y el PSE decía que el PNV negociaba con ETA. Es conocida aquella anécdota que decía que en su despacho continúan todavía  las señas de  sus  uñas en la pared al resistirse a abandonar el cargo y el despacho.

Por eso no la entiendo hoy en contra del Concierto, del Estatuto y de los "privilegios vascos".