Recibo a diario humillaciones, insultos y acoso sexual por redes sociales. ¿Por qué no se toman medidas más contundentes para luchar contra el ciberacoso?
Me llamo Indira, soy de Asturias y comparto contenido en redes sociales, pero donde más publico y donde tengo más seguidores es en TikTok. Al estar tan expuesta, soy consciente de que es más fácil recibir críticas de todo tipo, y me parece perfecto poder recibir críticas tanto buenas como malas. Sin embargo, no es lo mismo una crítica que una humillación o una falta de respeto.
A diario me encuentro con comentarios de todo tipo, diciendo que soy una mala madre (tengo una hija de 20 meses), metiéndose conmigo por tener un pie amputado, juzgando mi orientación sexual, insultándome por mi cuerpo, mi ropa… Lo peor de todo es que la mayoría de estos comentarios vienen de mujeres adultas e incluso con hijos.
Por otro lado, también me encuentro comentarios y mensajes privados de hombres que me dicen barbaridades, tratándome como si fuera ganado. Me han llegado a decir cosas como “quién fuera bikini para meterme en tu culo” o “yo sí que te haría una hija”. Por supuesto, al ignorarles o decirles que me dejen en paz, se pasan al otro lado, a los insultos, por no ceder ante sus comentarios.
Todo esto ha hecho que incluso tenga que vigilar con la ropa que llevo porque, según cómo, puedo tener una mitad de los comentarios de mujeres que me llaman “gorda” o “puta” y otra mitad de comentarios de hombres que me acosan sexualmente.
Llevo un año con TikTok y por suerte he aprendido más o menos a convivir con ello. Sin embargo, si un día me pilla en un mal día, es evidente que me afectará. Si puede pasarme a mí, no quiero pensar en gente que psicológicamente está más vulnerable, o simplemente está en una temporada más triste, porque todo este ciberacoso puede hundirles la vida.
Un colectivo que me preocupa especialmente es, por supuesto, los niños y niñas y adolescentes. Están en etapas de desarrollo y con muchas inseguridades, y toda la maldad que hay en las redes puede hacerles mucho daño. Como madre de una niña de 20 meses, estoy muy concienciada con este tema y no quiero que mi hija tenga que pasar por lo que estoy pasando yo.
En TikTok tengo bloqueadas unas 30 cuentas, y seguramente la mayoría sean de la misma persona. Hay gente que realmente se obsesiona y que no para de acosar. Creo que las redes deberían controlar todo esto mucho más, porque parece que el ciberacoso sigue produciéndose con total impunidad.
Ante esto, quiero dirigirme a los miembros del Parlamento Europeo, ya que el ciberacoso es un problema de escala global, para que se tomen medidas más contundentes para frenar el ciberacoso y perseguir a las personas que lo promulgan.
Detrás de las pantallas, todos somos muy valientes. Pensamos que estamos en un mundo que no es real y que lo que hagamos o digamos no tienen consecuencias, y sin embargo el dolor que puede causar sí es real. Soy muy partidaria de que cada uno opine lo que quiera, pero siempre digo lo mismo: críticas sí, humillaciones no.