Pregunta para Parlamento de Andalucía
A los 37 años me diagnosticaron un cáncer. ¿Cuándo se van a destinar los recursos necesarios a la investigación y cura del cáncer?
Me llamo Irene y estoy superando un Linfoma de Hodgkin.
El pasado 9 de febrero, mientras me duchaba, me noté un bulto bastante grande en la clavícula izquierda. Aunque en un principio lo achaqué a que me acababa de bajar la regla, decidí enviarle varias fotografías a mi tía, que es hematóloga. Al día siguiente fui a verla al hospital y me palpó la clavícula, axila e ingles. También me preguntó si había tenido fiebre o sudoraciones nocturnas pero, además del bulto, no había notado ningún cambio más.
A continuación me solicitaron una ecografía en la que se veía un ganglio bastante grande y otros un poco inflamados. Al día siguiente me hicieron un TAC con contraste, que mostraba lo mismo que la ecografía, un electrocardiograma y una analítica. Esta última salió perfecta y ni siquiera mostraba alteraciones en los marcadores tumorales. Por último, me practicaron una biopsia con la que me diagnosticaron un Linfoma de Hodgkin con esclerosis nodular.
Aunque me aseguraron que mi enfermedad tenía un buen pronóstico, el siguiente paso sería realizarme un PET para ver si había algo más afectado. Al ver los resultados de la prueba, me confirmaron que la enfermedad únicamente estaba en la clavícula y el mediastino.
Para terminar con el linfoma recibí cuatro sesiones de quimioterapia, que acabo de finalizar. En los resultados del PET de control no hay restos de la enfermedad, salvo en un ganglio en el mediastino, por lo que ahora empezaré un nuevo tratamiento.
Aunque soy consciente de que en mi caso, gracias a mi tía, todo ha ido bastante rápido, sé que generalmente todo se demora mucho más. Además, creo que la investigación del cáncer, así como su cura, deberían tomarse como prioridad urgente, pues es una enfermedad que cada vez afecta a más personas, cada vez más jóvenes.
Por ello, con esta iniciativa pido al Parlamento de Andalucía que destine más recursos a la investigación contra el cáncer, ya que la pandemia de la COVID-19 ha demostrado que si se destinan los recursos necesarios, se puede terminar con una enfermedad o, por lo menos, paliar enormemente sus consecuencias.