Pregunta para Congreso de la República del Perú
¿Por qué no se construyen espacios de participación juvenil en la acción climática de nuestro país?
Mi nombre es Ivana Escate, soy activista y formo parte de Jóvenes Peruanos frente al Cambio Climático, una organización juvenil que busca combatir la crisis climática a través de espacios de lucha dirigidas por y para jóvenes.
Yo nací en La Oroya, uno de los lugares más contaminados del país. Fue esta contaminación que la que me forzó a dejar mi lugar de origen hasta que llegué a la capital, Lima. Todo este proceso de ver cómo mi propio hogar fue vulnerado por actividades extractivas sin condiciones fue parte de lo que me inclinó a la defensa del medio ambiente. Pero yo no solo quería estudiar algo al respecto, o trabajar en algo referido a este tema: yo quería cambiar las cosas, pero nunca encontraba los espacios. Estaban los típicos programas de voluntariado en las municipalidades, con las que no me sentía realmente llena. No sentía que estaba haciendo incidencia. Y no era solo yo, sino muchos jóvenes que nos sentíamos incompletos por esto.
Es así que me di cuenta que a los jóvenes y las jóvenes se nos tiene relegados en la toma de decisiones que finalmente van a influir en nuestro futuro, cosa que no me hacía sentido. Se sigue obviando nuestra participación dentro de los diversos desafíos que tiene el Perú y nuestra situación de vulnerabilidad se ve reflejada en la falta de acceso a la salud y también a empleos dignos, situación que se ha recrudecido con la pandemia.
La acción climática es una de las tareas más importantes que tienen los Estados para el bienestar de las futuras generaciones y, sin embargo, en el Perú no existen suficientes espacios que tomen en cuenta lo que los jóvenes y las jóvenes tenemos que decir al respecto. Son inmensurables los aportes que podemos hacer, no solo de políticas públicas, sino de ideas innovadoras para que el planeta que quede en nuestras manos no sea uno agonizante.
La participación juvenil es un derecho que todos y todas tenemos. Pueden existir diferentes charlas, congresos y reuniones que busquen hacer frente a esta lucha climática, pero si no se toma en cuenta la opinión de las juventudes, como herederos y herederas de esas decisiones, cualquier acción termina siendo una eterna ilusión.
En los espacios públicos donde se llevan a cabo la toma de decisiones (gobiernos, ministerios, etc.) no existen espacios debidamente adecuados y suficientes para dar a conocer nuestras vulnerabilidades y tampoco nuestras propuestas. Las personas en los altos cargos tienen que interiorizar que nosotros y nosotras somos la población del futuro que se verá afectada por lo que ellos y ellas hagan en el presente. Hay muchos y muchas jóvenes que tenemos soluciones para brindar a cada una de estas entidades. Yo he venido realizando diversos proyectos, junto a mis compañeros y compañeras, pero no siempre somos tomados en cuenta. Es algo que tiene que acabar.
A través de esta campaña junto a Osoigo Perú quisiera que todos y todas nos demos cuenta que existe una población, los y las jóvenes, que tenemos mucho que decir y muchas ganas de participar, no solo en la acción climática sino en todas las decisiones que se puedan tomar. Que el adultocentrismo deje de ser parte de toda la gobernanza de un país. La juventud debe formar parte del futuro del Perú.
Hoy quiero pedir de tu ayuda. Si esta campaña logra obtener 300 firmas, autoridades y políticos de nuestro país tendrán que respondernos y darnos los espacios que necesitamos. Para firmar solo tienes que dar click en “Apoyar” y difundir con tus contactos de todas tus redes sociales. Nuestro futuro está en juego.