Hola Hugo!

Te agradezco que me hagas esta pregunta porque creo que hace falta poner de relieve un problema que llevamos años acarreando en este país.

En primer lugar habría que definir qué entendemos por España. España, como bien ha expresado Fernando Savater en varias ocasiones, no es otra cosa que "el nombre de la implantación de los derechos de los ciudadanos". España no es una entidad metafísica, es una nación de ciudadanos libres e iguales porque así lo expresa la Constitución Española aprobada en 1978. La Constitución es lo único que reconoce derechos y libertades a los ciudadanos del país, y lo hace con indenpendencia del lugar donde uno reside, su lengua, su cultura, sus creencias, clase social, orientación sexual... No hay derechos que emanen de la tierra, de un sentimiento o de una cultura. Por tanto, creo que defender España es progresista porque la Constitución nos protege de atropellos a nuestros derechos y libertades que todos podemos sufrir en nombre de una lengua, un sentimiento, una determinada fe o la variopinta excusa que se apropie aquel que quiere anular los derechos de otro ciudadano. 

La unidad de España también garantiza la igualdad de los ciudadanos ante los que quieren marcar diferencias (por supuesto siempre para obtener un privilegio respecto a otros ciudadanos).

Por ello, si me preguntas ¿Está en riesgo la unidad de España?, te diré que en mi opinión sí, aunque también está en nuestra mano garantizar y conservar esa unidad. 

Pero ¿quién pone la unidad de España en riesgo?. Evidentemente los nacionalistas tienen un proyecto rupturista de la union entre españoles, pero son minoría en España e incluso en comunidades como Cataluña o País Vasco. Que haya ciudadanos de ideología nacionalista o que votan partidos independentistas es respetable dentro del pluralismo democrático, y de hecho nunca han ocultado sus intenciones. Lo preocupante es que aquellos partidos que dicen defender la unidad de España y la igualdad entre españoles hayan renunciado a llevarlo a la práctica. 

España sufre las consecuencias de una derecha acomplejada y una izquierda desnortada que ha renunciado a su razón de ser y considera al nacionalismo reaccionario como algo progresista. No existe en este país una asignatura de Educación para la Ciudadanía, que eduque a los chavales en valores cívicos y forme ciudadanos en vez de súbditos. Lo que en cualquier país de nuestro entorno es el envidiable patriotismo constitucional.

PP y PSOE llevan años en la ya demostrada errónea estrategia de contentar al nacionalismo y cediendo a concesiones a CIU y PNV para gobernar. Los partidos independentistas en Cataluña han aprobado recientemente una declaración abiertamente inconstitucional y desacatado al TC y al orden constitucional sin que el gobierno de la nación haga nada para impedirlo. Ni PP, ni PSOE ni Ciudadanos están dispuestos a aplicar el artículo 155 de la Constitución para requerir al gobierno autonómico de Cataluña que cumpla ley.

Por eso la libertad, la igualdad y la convivencia entre españoles está en riesgo. No por culpa de los nacionalistas sino porque no existe una respuesta clara ni un discurso de pedagogía de lo común por parte de los que se dicen constitucionalistas. Desde hace 8 años UPYD viene desempeñando esta labor tan necesaria a pesar de los obstáculos y dificultades que nos imponen, y es lo que vamos a seguir haciendo. Por eso queremos que los ciudadanos nos vuelvan a apoyar el 20-D.

Un saludo!

Jorge.