Mi nombre es Lorena y tengo cáncer de mama. Desde que tuve a mi hija pequeña, como tenía antecedentes de cáncer, me hacía controles anuales. Gracias a la empresa en la que trabajo tengo seguro privado, así que aprovechaba y en junio o julio iba a hacerme el control que constaba de mamografía y de ecografía.

El año pasado no pude ir en verano y lo pospuse a septiembre. El día 22 fui a hacerme la ecografía. En la eco vieron dos bultitos en la mama derecha así que la técnico recomendó que me hicieran una biopsia. El 25 de septiembre me hice la mamografía en otro centro privado y aquí no se veía nada. 

Pedí una segunda opinión y me volví a repetir la ecografía, esta vez a través de la Seguridad Social. Me dijeron que como tengo el pecho muy denso seguramente la mamografía no era capaz de captar nada. 

El 5 de octubre me confirmaron que se trataba de cáncer de mama y el 14 de ese mismo mes empecé el tratamiento. He tenido cuatro quimios rojas, que son las más fuertes, y 12 un poco menos fuertes. Estas quimios han sido semanales y las han mezclado con anticuerpos monoclonales dirigidos al Her2, que es mi tipo de cáncer.

En marzo de este año acabé el tratamiento y en abril me han operado. Me han hecho una mastectomía total con reconstrucción. Ahora estoy a la espera para ver si se tiene que cambiar el tratamiento o si seguimos con el mismo. 

Yo tengo 43 años, y cada vez es más común que el cáncer de mama se detecte en gente joven. ¿Por qué las pruebas para la detección precoz comienzan a los 50 años? Tenemos una Seguridad Social muy buena, pero en este aspecto se quedan atrás.

Creo que se deberían analizar los datos, porque igual hace un tiempo sí que era a los 50 cuando era más probable que se desarrollara un cáncer pero a lo mejor eso ha cambiado. 

Me gustaría que la Asamblea de Madrid invirtiera más recursos en la investigación de todo tipo de cánceres y que además, se plantearan el bajar la edad mínima en las revisiones mamarias en la Seguridad Social. La prevención y la detección precoz son fundamentales.