Gracias a Comunidad Oscense por hacerme esta pregunta, porque además es una cuestión que me preocupa enormemente, ya que el Campus oscense es un pilar básico de mi proyecto de ciudad. 

Es conocido que un Ayuntamiento no tiene competencias propias en materia de planificación o programación de estudios universitarios. Esas competencias pertenecen a la Comunidad Autónoma. Así se reconoce en el propio Estatuto de Autonomía de Aragón, en la Ley Orgánica de Universidades (LOU) O la Ley del Sistema Universitario de Aragón (LOSUA). Pero un Ayuntamiento sí que puede impulsar políticas en una determinada dirección, instar al Gobierno de Aragón, proponer al Gobierno. Y, en ese sentido, cobra importancia el papel que debería desarrollar de una manera más activa el Patronato del Estudio General de Huesca, órgano compuesto por el Ayuntamiento, por la Diputación Provincial, el Gobierno de Aragón, la Universidad de Zaragoza y el Instituto de Estudios Altoaragoneses.

¿Cuáles serían las líneas básicas que propondría a ese Patronato y, por extensión, al Gobierno de Aragón y a la Universidad de Zaragoza?.

1. En primer lugar consolidar el Mapa de Titulaciones, con criterios irrenunciables, como evitar duplicidades, y conceder identidad propia a través de programas de investigación en esas materias. Por ejemplo, estableciendo como hace la Diputación Provincial de Huesca, convenios de colaboración con la Universidad para el desarrollo de programas concretos o la mejora de prácticas clínicas hospitalarias. 

2. En segundo lugar, implantar nuevos másteres de investigación y de carácter profesional en la ciudad de Huesca. Llegando a esa especialización a través de la creación de infraestructuras científicas propias, como laboratorios especializados en el desarrollo de nuevas tecnologías, de nuevas aplicaciones y creando un espacio fuerte entre Universidad y Parque Tecnológico, como líneas de investigación ambiental aprovechando el entorno de la Provincia de Huesca y su alta diversidad o nuevas líneas de especialización en materia de turismo.

3. En tercer lugar, promover la estabilidad profesional de docencia en el Campus de Huesca, evitando el número elevado de profesorado asociado y fijando criterios claros de carreras profesionales, asociadas a los procesos de investigación en el propio campus de Huesca. La estabilidad de profesores y de personal de la Universidad es, sin duda, un elemento para contribuir a mejorar la calidad y excelencia universitaria.

4. En cuarto lugar, la ciudad de Huesca ha realizado en los últimos doce años un esfuerzo muy importante para crear infraestructura universitaria. Más de 19 millones de euros se invirtieron en nuevos espacios destinados a docencia. Habría que ir concluyendo la rehabilitación de esos espacios y acometer entre todas las instituciones representadas en el Patronato del Estudio General, la remodelación y adecuación del edificio del antiguo Seminario para convertirlo en el Gran Colegio o Residencia Universitaria del Campus de Huesca. Para ello, habría que establecer un compromiso plurianualizado.

5. Y, en quinto lugar, evaluar de manera preventiva el impacto y las consecuencias que los recientes cambios legislativos en educación universitaria puede tener para este Campus. Es una forma de anticiparse y de encontrar oportunidades donde aparecen desventajas.