Soy una maestra de la escuela pública y fundadora de ‘Maltrato en la Escuela’ en Instagram. La iniciativa surgió a raíz de ver casos de maltrato en la escuela en la que trabajo a diario. No sé cuál debería ser el protocolo a seguir para denunciar estos casos porque están muy normalizados. Si intentas informar al equipo directivo, te dicen que no es algo como para trasladar a la Consejería de Educación o tener que denunciarlo. Consideran que parte de la función de un docente es castigar a un niño, humillarlo, impedir que se mueva o que hable, etcétera. Además, puedes encontrar rechazo y acoso por parte de los docentes a los que intentas señalar.

Al no estar de acuerdo con cómo se procedía y al no ser la única, decidí crear este espacio de comunicación para visibilizar los mensajes de testigos de malos tratos a la infancia. Son hechos que le pueden ocurrir a cualquier criatura sin importar su condición ni contexto.

Quería saber si solo pasaba en mi círculo o era algo que sufrían en más centros y más docentes podían corroborar. Me he dado cuenta de que no es un caso aislado y llegan testimonios a diario.

En Infantil son frecuentes amenazas, intimidaciones, gritos y zarandeos. En Primaria y Secundaria los maltratos y castigos están más relacionados con la estima social o el desprecio. Algunos docentes piensan que el castigo es lo que más funciona para conseguir un determinado objetivo, pero, ¿deberíamos obligar a una criatura a realizar 4 fichas diarias? Quizás estamos errando en la base, en lo que le pedimos o exigimos al alumnado. Es un tema muy complejo y enraizado en la tradición escolar de nuestro sistema educativo.

Influyen muchas otras cosas, como las condiciones en las que trabajamos los maestros, con ratios elevados, con estrés y malas condiciones laborales. En cualquier caso, todas estas circunstancias no justifican ese trato a la infancia. 

¿Qué es lo que lleva a un docente a maltratar a una criatura? Quiero hacer una llamada a la reflexión y al debate y poner el foco en lo que está pasando en el contexto escolar. Quiero que se pasen por nuestro perfil en redes sociales y que puedan leer estos testimonios de maltrato: de niñas y niños que verbalizan lo que les está ocurriendo, de familias que lo han vivido en primera persona o de docentes que han presenciado estas escenas.

Por todo esto, pido al Congreso de los Diputados que se preocupen por educar contra el maltrato infantil a los docentes y directivos de los centros escolares, para que de esta forma podamos contar con las herramientas adecuadas y que se extienda la sensibilidad y respeto hacia la infancia. Hablamos de profesionales que deberían estar bien formados para dar un trato digno a la infancia y, si no es así, deberíamos cambiarlo.