Pregunta para Senado
Sufro cáncer de ovario. ¿Cuándo se van a destinar más recursos a la investigación de esta enfermedad y al acompañamiento psicológico de las pacientes?
Me llamo Margarita y estoy atravesando un cáncer de ovario.
Hace dos años, cuando tenía 55, empecé a sentir dolores y una fuerte hinchazón en la barriga. Al principio, no le di demasiada importancia, pero llegó un punto en el que ya no podía comer prácticamente nada. Me salieron granos en las manos, y cuando fui al médico me dijeron que seguramente todo se debía al estrés. Me recetó unas pastillas y mejoré, aunque pasado un tiempo volví a estar igual.
Visité de nuevo a mi médico de cabecera y, tras palparme la tripa y recetarme unas nuevas pastillas, me dio una cita para ir al médico digestivo un mes y medio más tarde. Cuando este me vio me dio la baja laboral y me derivó a urgencias de inmediato. Allí me hicieron un TAC y comprobaron que tenía líquido en el pulmón. A la mañana siguiente me dieron el diagnóstico, confirmándome que tenía cáncer de ovario. Aunque estaba muy extendido, el hecho de ser joven y estar sana jugó mucho a mi favor.
A continuación, me cambié de hospital y empecé a recibir quimioterapia administrada en seis ciclos. Tras recibir el tercero, me hicieron un TAC y, aunque el tumor había disminuido, todavía no me podían operar. Seguí con los otros tres y me hicieron la prueba genética, con la mala suerte de que di positivo en el gen BRCA2. Al terminar el tratamiento me operaron extrayéndome el bazo, los ovarios, las trompas, el útero y la vesícula.
Aunque la intervención fue un éxito, tengo un 80% de posibilidades de recaer. Por eso, para combatir esta posibilidad, estoy tomando unas pastillas inhibidoras y me realizo análisis de manera mensual.
Aunque a día de hoy me encuentro bien, a lo largo de este proceso me he sentido muy poco acompañada psicológicamente. Además, pienso que si me hubiesen hecho las pruebas pertinentes la primera vez que fui al médico, quizá el tumor no hubiese estado tan extendido cuando me lo diagnosticaron.
Por ello, con esta iniciativa pido al Senado que destine más recursos a la investigación del cáncer y a la mejora de las pruebas para su diagnóstico precoz, así como a la ayuda psicológica prestada a los pacientes oncológicos.