Mi nombre es María y tengo cáncer de mama. Venía de una operación de prótesis de cadera, y me estaba recuperando. No sabemos si por culpa de la operación o por culpa del propio cuerpo tuve un cambio hormonal, y a los 2 meses y medio mi pecho se inflamó.

No le dimos mucha importancia al principio porque yo tenía una mastitis que se me había quedado tras el embarazo, por lo que la parte superior del pecho izquierdo siempre estaba un poco más dura de lo normal.

Aún así, me hice la exploración pero no noté nada. A los dos días vimos que el pecho había aumentado de tamaño. Tengo la suerte de que mi marido trabaja en el mantenimiento electro médico en el hospital y habló con una enfermera que dijo que debería ir a mirarlo. Así que me presenté en Urgencias. 

Al principio, al palparlo parecía una mastitis así que me recetaron antiinflamatorios y antibióticos. Pero para quedarnos más tranquilos decidieron que me hiciera una ecografía mamaria. Me recomendaron que fuera a otro hospital, también de la Seguridad Social, y que si había hueco pues que me la hicieran.

Fui y expliqué lo que me pasaba y me dijeron que no me preocupara, que esperara 2 minutos que había un hueco libre. En la ecografía iban mucho para delante y para atrás. Yo ahí ya noté que había algo. Me dijeron que me iban a hacer una mamografía para estar más seguros.

En el pecho derecho no tuve ningún problema, pero en el pecho izquierdo sentí mucho dolor. Me volvieron a mandar otra ecografía y fue cuando me dijeron que tenía una mancha pero que estaba tapada por una mastitis, por eso no se veía el bulto. Medía 5 centímetros, y aparte tenía el ganglio centinela afectado y el de al lado que no sabía muy bien cómo podía estar. Me hicieron la biopsia y a los tres días me llamaron para decirme que era cáncer.

Me atendieron muy rápido, todo fue muy bien. Estaba en principio de fase dos pero tengo un tipo de cáncer que no es de los más agresivos pero que crece muy rápido. A los 15 días ya me estaban dando quimio. Tuve 16 sesiones de las cuales 12 fueron semanales y 4 cada veintiún días.

El trato por parte de las enfermeras, la oncóloga fue excepcional Me ha tocado un gran  equipo médico. Acabé el día 31 la quimio y me acabo de hacer las pruebas del preoperatorio. En mi caso no me van a quitar los pechos porque mi cáncer no es genético, sino que es de tipo hormonal por lo que no hace falta, solo tienen que limpiar la zona donde ha estado el tumor. Me tienen que cortar la masa superior del pecho, quitarme el ganglio centinela y el de al lado. Me van a operar los dos pechos porque había llegado casi al pezón, así que me tienen que elevar ambos pezones. Pero el pecho en sí no me lo quitan.

Creo que es muy importante que se destinen más recursos económicos a la investigación del cáncer, de cualquier tipo. Hay infinidad de tipos de cáncer si solo nos referimos al de mama: el HER2 +, el HER2+-. Hay infinidad y no todas tenemos el mismo tipo. También hay hormonal, hay genético… Con más investigación esto podría solucionarse. Cada vez hay más jóvenes que sufren cáncer.

A mi me lo detectaron con 36, pero conozco a chicas que con 20 y pocos ya tienen cáncer de pecho. Hay que hacer revisiones antes, no a los 45 o 50 años. Puedes tener 16, 18, 25 o 30 años y tener cáncer.

Hasta que no lo vives, no te das cuenta de la cantidad de casos de cáncer que hay. Muchas veces las enfermeras tenían que atender a unas 300 personas diariamente. También ves a gente que venía de trabajar a darse sus sesiones… 

Quiero pedirle al Parlamento de Galicia que baje la edad de las revisiones mamarias en la Seguridad Social, para que al menos hagan una a los tres años a partir de los 20 o 25 años. También creo que se debería invertir más en la investigación, porque si se investigara más seguro habría menos casos.