Me llamo Maria Jose y vivo en Lugo. En julio del año pasado me percaté de que tenía un bulto en el pecho. En aquel momento, no se hacían visitas presenciales debido a la pandemia de la Covid-19, así que por teléfono le expliqué a mi médico de cabecera lo que me pasaba. Aun así, insistí en que necesitaba que me explorara. Me dio vez y cuando fui, me dijo que seguramente se trataría de un ganglio inflamado, pero que igualmente me daba cita para hacerme una mamografía y una ecografía mamaria después de aproximadamente 15 días. Una vez allí, me indicaron que lo que se apreciaba en los resultados de las pruebas podía tratarse de calcificaciones, pero que me practicarían una biopsia para asegurarse. Me ofrecieron hacérmela el mismo día y yo accedí. Después de 15 días, aproximadamente, me llamaron para darme hora con la cirujana que me informó que padezco un cáncer de mama triple negativo.

Hasta el momento, me he tenido que someter a 12 sesiones de quimioterapia que han durado medio año y que terminaré este mismo mes. Después de esto, me intervendrán quirúrgicamente y, finalmente, me someteré a un tratamiento de radioterapia. También estoy a la espera de conocer los resultados del test genético. Aunque lo previsto es que haya mucha demora en saberlos debido a la afección de la pandemia, conocerlos puede ser determinante para prevenir la necesidad de pasar por quirófano dos veces, ya que si da negativo con una cirugía conservadora bastaría, pero si da positivo necesitaré una mastectomía.

El proceso de enfermedad que he vivido hasta el momento me ha hecho percatar de algunas carencias como, por ejemplo, la falta de información clara en relación con el diagnóstico. Es imprescindible que cuando a una persona le anuncian que padece cáncer, le puedan dar al máximo de información comprensible sobre la patología que, en muchos casos, es completamente nueva para quien la padece. También considero necesario que se apueste para la investigación de los beneficios del deporte y la nutrición durante los tratamientos oncológicos y que se empiece a implementar algún tipo de acompañamiento público en este sentido. Es en este sentido, que me dirijo a los políticos del Parlamento de Galicia, ya que son quienes me representan, para que me respondan a la pregunta: ¿por qué no se garantiza un acompañamiento informativo, nutricional y deportivo a los pacientes oncológicos?

También me gustaría poner sobre la mesa de las instituciones la necesidad que hay de que se mejore la inversión destinada a la investigación del cáncer de mama triple negativo; una patología muy poco investigada y de las que tiene peor pronóstico debido a su agresividad.