Pregunta para Asamblea de Madrid
Mi nombre es Marina y soy pedagoga. ¿Cuándo se incorporará la lengua de signos a la educación pública desde una edad temprana para fomentar la inclusión de las personas con dificultades en el lenguaje?
Mi nombre es Marina y soy pedagoga en Madrid, por lo que estoy especializada en ayudar a alumnos con dificultades a entender de la mejor manera posible los contenidos necesarios en su educación. En estos años me he dado cuenta de que Madrid tiene una cuenta pendiente con la lengua de signos.
La lengua de signos es el lenguaje basado en gestos que utilizan las personas con dificultades en el habla para comunicarse. A pesar de lo que se suele creer esto va mucho más allá de personas sordas, quienes son la mayoría de sus hablantes, también incluye a niños y personas con TEA, dificultades con el lenguaje por una accidente… etc.
Para conseguir una sociedad inclusiva y que nadie se sienta aislado en un aula ni en su vida laboral es esencial que todas las personas tengan la oportunidad de comunicarse con quienes tiene a su alrededor con las menores barreras posibles.
Si solamente saben lengua de signos las personas con sordera ¿cómo se van a comunicar los niños con sus compañeros si ellos desconocen la forma? ¿por qué no incluirla en la educación ordinaria como una asignatura más?.
Quiero dirigirme a los políticos de la Asamblea de Madrid, ya que soy de Madrid y son mis representantes en dicha cámara, para preguntar cuándo se incorporará la LSE a la educación pública desde una edad temprana para normalizarla y permitir que todos los alumnos tengan la posibilidad de comunicarse con sus compañeros.
Es una necesidad para miles de personas, además impulsaría que los niños aprendieran una nueva lengua de manera paulatina, como se hace con el inglés por ejemplo, y sería un gran paso hacia la inclusión y el fomento de la diversidad en las aulas.
Si bien es cierto que ya existen colegios con preferencia para LSE son muy pocos y dejan abandonados a muchas regiones de la Comunidad, por ejemplo en Alcalá de Henares el acceso a cursos o educación inclusiva en lengua de signos supone un desplazamiento diario a Madrid, recorriendo más de 50 kilómetros.
Una asignatura, ya fuera optativa, obligatoria o incluso una extraescolar de lengua de signos en los centros de educación públicos abriría las puertas a miles de personas tanto a nivel social como profesional, es una necesidad trabajar por la inclusión y dejar de excluir a todos aquellos que tienen dificultades para comunicarse. Eliminemos las barreras.