Mi nombre es Marina Moreno Lara y soy psicóloga, aunque empecé estudiando Historia del Arte porque mi vocación es la docencia. Más tarde me di cuenta de que la psicología estaba muy ligada con las emociones, ya que impiden o facilitan que el aprendizaje se desarrolle correctamente. 

El alumnado suele centrarse en objetivos, y eso está genial, pero dejan de lado las emociones. Está demostrado que el cómo nos sentimos afecta directamente a las acciones, a la toma de decisiones y a la manera de afrontar el aprendizaje. Por lo que me sorprende mucho que, habiendo evidencias científicas de esto, en los colegios no se aborde.

La educación emocional o la educación en la gestión de emociones debería tratarse de una asignatura que fuera muy práctica, que incluyera ejercicios para que los niños y niñas puedan conocerse a ellos mismos, que hablara sobre el autoconcepto y sobre la autoestima. También estaría bien recomendar lecturas que sean acordes a la edad y realizar dinámicas de terapia grupal.

También es importante que este trabajo se haga de forma transversal. Es decir, que se trabaje en todas las asignaturas no solo en un momento del currículum académico. También, se debería incluir a las familias en todo este proceso. Las escuelas deben incluir a los padres, porque al final somos un equipo. 

Yo me he dado cuenta de que esta asignatura es fundamental porque muchos chicos y chicas que vienen al gabinete no encontraban un para qué, una motivación. Estudian porque es lo que toca o porque no quieren disgustar a sus padres. Si les enseñamos a que cada uno encuentre su motivación, podrán llegar a esos objetivos o metas finales de una forma más liviana. Harán con gusto esos objetivos del día a día no porque “me toca”. 

Tengo la sensación de que los chicos y chicas tienen un poco de resignación en todo lo relacionado con los estudios. Que no aprenden tanto como podrían. Me gustaría pedirle a las Cortes Valencianas que incluyan en los planes de estudio una asignatura que sirva para que los jóvenes tengan las herramientas necesarias para conocerse y poder aprender a gestionar lo que les pasa.