No podemos tolerar que haya 22.000 personas paradas en Vitoria-Gasteiz y más de 27.000 en Álava. Queremos empleo digno. No puede ser que haya personas que estén trabajando y no consigan superar el umbral de la pobreza. Queremos implantar una economía sostenible y socialmente avanzada, que esté al servicio de las personas y su bienestar, que respete los límites del planeta, que incentive las iniciativas asociativas y cooperativas, empresariales, económicas y financieras comprometidas con los principios del empleo estable, la sostenibilidad ambiental, la igualdad de género, la cooperación y la participación.

Invertiremos en potenciar sectores sostenibles como la rehabilitación energética de edificios, el desarrollo de energías renovables, la movilidad sostenible o el ecoturismo, son algunos ejemplos. Además, queremos favorecer la economía social fomentando el pequeño comercio como generador de riqueza y de cohesión vecinal. Frente al modelo de vuelta al ladrillo y la inversión en obra pública redirigiremos el presupuesto hacia la inversión en I+D+I, en colaboración con las empresas, la universidad, centros de formación y centros de investigación. Así, favoreceremos una reconversión del sector industrial que haga que las empresas asentadas en la ciudad puedan competir en el mercado globalizado.

Queremos recuperar la gestión pública de los servicios básicos municipales como por ejemplo el contrato de limpieza.

También apoyaremos el emprendimiento y favoreceremos el desarrollo de ideas empresariales que sean económicamente viables y que cumplan con los estándares en materia social y ambiental marcados anteriormente.

Para llevar a cabo todas estas iniciativas intensificaremos la lucha contra el fraude fiscal y dirigiremos la recaudación obtenida por esta vía a la creación de empleo.