¿Por qué ha tenido tan poca repercusión el informe de Argituz?
Kaixo Unai,
El hecho de que tengas que hacer esta pregunta demuestra lo mucho que tenemos que hacer todavía en Euskal Herria en defensa de los derechos humanos, TODOS los derechos humanos.
Durante décadas hemos vivido el conflicto armado vasco como una dicotomía ETA-democracia, como si la única violencia ilegítima fuera la generada por ETA. Por desgracia, cada día queda más claro que los medios utilizados por las fuerzas de seguridad del Estado han vulnerado muchas veces los derechos de las personas detenidas y presas, y que por mucho que los responsables políticos de dichos cuerpos policiales hayan querido circunscribirlo a episodios excepcionales, la tortura y los malos tratos han sido más que puntuales, han sido lo suficientemente habituales como para que se pudieran dar sin el conocimiento y cobertura de los mandos, tanto policiales como políticos.
Por desgracia, tengo que darle la razón a Iker Armentia cuando dice que la denuncia de malos tratos se da con naturalidad cuando los hechos aparecen en Afganistan, Irak o Palestina, por citar algunos casos, pero la cosa se complica cuando la denuncia aparece en nuestra sociedad. Reconocer que en la lucha contra la violencia de ETA se han utilizado de manera planificada medios ilegales, inmorales y fuera de toda ética es reconocer que para superar el estigma de la violencia toda la sociedad vasca ha de hacer autocrítica, es reconocer que hay víctimas de múltiples violencias y que a todas les debemos la verdad, el reconocimiento, la reparación y el compromiso de no repetición. Y eso es mucho reconocer para algunas formaciones políticas y medios de comunicación.
Aun así, creo que la sociedad vasca está avanzando en el reconocimiento de todas las víctimas de vulneraciones de derechos humanos, vengan estas de donde vengan, y nuestro compromiso como agentes políticos ha de estar con ellas, porque no son víctimas de unos u otros, son nuestras víctimas.
Agur bat,
Pello.
Compartir
En este artículo de Eldiario.es Iker Armentia cuenta que Argituz ha realizado un informe con la colaboración de expertos a nivel mundial, para determinar si las denuncias de tortura a presos o detenidos vascos son o no veraces. Al parecer, ayer se presento el informen en el Parlamento Vasco, y determina que en la mayoría de los casos las denuncias merecen "el máximo nivel de credibilidad?
¿Por qué ha tenido tan poca repercusión en los medios?
http://www.eldiario.es/norte/almargen/realidad-oculta-torturas-Espana_6_323427694.html