Pregunta para Asamblea de Madrid
Soy Pilar, superviviente de cáncer de mama y tengo trastorno límite de la personalidad. ¿Cuándo se le dará más visibilidad y ayuda a las personas con alguna enfermedad mental que atraviesan un cáncer?
Soy Pilar y soy una superviviente del cáncer de mama y tengo trastorno límite de la personalidad.
La primera vez que tuve contacto con la palabra cáncer fue debido a un cáncer de piel que me detectaron en la cara en la zona del entrecejo. Solo requirió una operación. Tan solo cuatro meses después, me detectaron cáncer de mama en una mamografía rutinaria de revisión.
A partir de ese mismo día, el día de mi diagnóstico, me volví a poner en contacto con mi hermana Pepa con la que he escrito un libro autobiográfico para contar mi historia. Dentro de poco saldrá a la venta y se titula: Sin soltar mi mano, historia de una mujer con cáncer y Trastorno Límite de la Personalidad.
En el libro cuento mi historia con el cáncer pero también con mi trastorno mental y como se afectan mutuamente. Para poder mostrar y visibilizar estas dos enfermedades que tantas veces la gente calla porque las consideran tabú.
Lo primero que quiero hacer es agradecerle a todas las personas que me han apoyado y me han acompañado durante el largo camino de recuperación y de tratamiento que he llevado a cabo. No ha sido fácil pero me siento muy agradecida por cada una de las personas que se han cruzado en mi vida para apoyarme, arroparme y regalarme su tiempo y su cuidado. Desde mis amigos más cercanos, a mis compañeros de trabajo, a mis médicos, psicólogos y psiquiatras, pasando, por supuesto, por mi hermana Pepa.
Cuando me detectaron el cáncer lo primero que me hicieron fue la operación en la que no sabía muy bien si me iba a despertar con pecho o sin pecho. Por suerte no tuvieron que hacerme una mastectomia completa.
Durante todo el tratamiento de quimioterapia mi mente dejó de centrarse en sentimientos negativos de soledad, vacío tristeza y ansiedad que se apoderan de mi debido al trastorno límite de personalidad. Me encontré en mi recuperación y en superar el cáncer.
Aunque durante todo el tratamiento sufrí muchísimo, tuve muchos dolores y muchos efectos secundarios y numerosas visitas al hospital. Pero mentalmente estaba estable.
Cuando terminé el tratamiento de quimioterapia y empecé el tratamiento de radioterapia mi estado emocional volvió a empeorar. Me encontraba emocionalmente muy enferma. Con la radioterapia empecé a encontrarme más cansada y sin ganas de nada, no le encontraba el sentido a mi vida, volvía a tener pensamientos suicidas por lo que tuve que volver a hacer tratamiento psiquiátrico. Gracias a mi psicooncóloga y al mis psiquiatras del hospital de día Chamartín he podido volver a encontrarme mejor, aunque es una enfermedad con la que tendré que aprender a vivir el resto de mi vida.
Cuando una persona como yo pasa por una enfermedad grave como el cáncer lo hacemos de manera diferente al resto. En estos momentos tengo reconocida la incapacidad y me centro en poder trabajar con mi presente y mi futuro inmediato.
Quiero utilizar esta plataforma para visibilizar a las personas que como yo tienen algún trastorno mental y pasan por una enfermedad grave porque no es nada fácil y es un añadido a nuestro sufrimiento emocional que muy pocas personas tienen en cuenta.