Pregunta para Parlamento de Andalucía

Tengo una hija de 7 años con Autismo y tuvimos problemas hasta que la llevamos a un colegio de educación especial. ¿Cuándo vamos a entender que la inclusión va mucho más allá de poner aulas TEA en colegios ordinarios?

198 personas la han apoyado
198 de500 Apoyos
Ruth R Pregunta de Ruth R

Me llamo Ruth, resido en Sevilla y tengo una niña de 7 años con TEA. Lo supimos relativamente pronto, a los dos años nos dieron el diagnóstico: alto riesgo de TEA, ahora ya TEA grado 3, lo que antes se conocía como autismo severo. Desde entonces, la llevamos a Atención temprana y le hemos dado todas las terapias que hemos podido. Hay una carencia importante en la información que reciben los padres a cerca de las dificultades que un niño o niña con TEA enfrenta. Hay una cierta tendencia entre los profesionales a tratar a los padres como si supieran  todo sobre autismo. Este trastorno es tan amplio y existen tantos métodos para su tratamiento, que es inviable siendo padres que trabajan convertirse en expertos en la materia. Necesitamos informadores que aporten soluciones, no recetas fáciles o imposiciones. Tuvimos problemas en un centro de educación infantil donde su comportamiento era un problema y tuvimos que desembolsar mucho dinero para llevarla a otro centro donde si la atendían como requería, todo mejoró.

El gran problema vino al iniciar la etapa escolar; la primera etapa de infantil la hizo en un colegio privado y allí nos dijeron que no tenían los recursos suficientes para atenderla y nos sugirieron que debíamos llevarla a un colegio público donde, supuestamente, sí los tienen. Acudimos al servicio de orientación educativa, ellos solo te hablan de colegios ordinarios con aulas específicas, pero nadie te habla de los colegios de educación especial.

Maia empezó en un colegio ordinario con aula TEA. En el centro tenía una PT (pedagoga terapéutica),  una apoyo (PTIS) y un AL (Audición y Lenguaje). PT es una persona que ha estudiado educación especial, el autismo no es su especialidad, ni es experto en esta clase de educación, tienes que cruzar los dedos para que en el Además las horas del profesor/a de audición y Lenguaje (AL) eran escasas y a veces inexistentes, sin olvidar que aunque al AL le llamemos ”logopeda” no lo es.

Las aulas específicas dentro de un colegios públicos son como islas dentro del Centro Escolar. Hablan de “inclusión” pero la realidad es bien distinta. Incluir un aula específica dentro de las instalaciones no es inclusión y tampoco lo es compartir recreo con otros niños.

Maia tenía 6 años recién cumplidos cuando tuvo una sobrecarga sensorial en el aula, como no habla, intentó comunicarse de múltiples formas, a su manera, expresando que deseaba irse del colegio, pero nadie la entendió, ese día su PT estaba ausente a pesar de que los días anteriores ya habían sido difíciles. Las repercusiones fueron terribles, para ella y para nosotros. Hubo una regresión muy importante y todos los logros de los últimos tres años se desvanecieron en un dia. Estuvo un mes sin salir de casa, otros mes saliendo a duras penas y cinco meses sin ir al colegio, con terapeutas en casa que nos ayudasen a revertir la situación. Seguido de visitas al neurólogo; al psiquiatra público y privado; psicólogo clínico y el desembolso de más 4.000€ en terapias, esto para una familia de cuatro miembros que cuenta con un solo sueldo es impensable.


 

Por recomendación de estos profesionales investigamos cómo funcionan los colegios específicos (Educacion Especial) y encontramos uno perfecto para ella, es concertado y no pagamos nada, tiene psicóloga, fisioterapeuta, logopedas, educadores y cuidadores, (profesores tutores profesores de ptval, programa de formacióny transicóm a la vida adulta, profesara). Profesores especializados en TEA y con amplia experiencia, un gimnasio dotado con equipamieno especial, una sala sensorial, huerto y un sinfín de actividades extras como paseos diarios, natacion, actividades deportivas, visitas...

Maia mejoró de forma inmediata y el colegio está trabajando de forma intensa en sus problemas, pero sobre todo nuestra niñas vuelve a ser feliz.

Al descubrir todo lo que te ofrece un colegio de educación especial, nos dimos cuenta de que podía haber sido mucho mejor para el desarrollo de la niña, si no ponemos profesionales especializados para estos niños cuando tienen 6 años y están en pleno desarrollo y aprendizaje, pueden perder muchas posibilidades.

Necesitamos visibilidad en lo referido a los colegios de educación especial, solo nos hablan de aulas TEA o específicas en colegios ordinarios aludiendo a la inclusión, pero la inclusión es mucho más que eso. Ir a un colegio donde estás todo el tiempo en un aula reducida con cinco niños y solo te relacionas con los demás durante el recreo, no es inclusión. Tampoco tienen a los profesionales adecuados en los centros públicos; debemos dotar a la educación pública de este personal, y sobre todo, incluir especialistas en TEA, porque cada caso es un mundo. Queremos un sistema que asegure que nuestros hijos están atendidos por profesionales adecuados porque es fundamental para su desarrollo.

198 personas la han apoyado
198 de500 Apoyos