Conocemos a los perros principalmente como mascotas, sabemos que hay perros policía, perros de rescate y perros guía para personas invidentes, sin embargo, lo que muchos no saben es que existen los “perros de asistencia” para acompañar a personas o niños con TEA.Perros a los se educa desde cachorros para cubrir necesidades muy concretas del menor, ayudándoles día a día con la gestión de rutinas y emociones, siempre desde la empatía, sin juzgar y con el amor incondicional de un fiel amigo.

Así es como nuestra familia pronto tendrá un nuevo miembro de cuatro patas. Un amigo para Mario y Pablo, nuestros hijos de 9 y 5 años, la mayor alegría de nuestras vidas y quienes nos enseñan que la vida en el espectro, es una lucha continua en la que cada dificultad lograda es un gran momento para celebrar. 

El perro de asistencia que esperamos, está entrenado para ayudar a niñxs autistas en la gestión de conductas que puedan dañarles emocionalmente o ponerles físicamente en peligro. En nuestro caso: 

• El “escapismo”, Pablo no tiene noción del peligro, y a la mínima sale corriendo ocasionando situaciones de peligro como cruzar la carretera o perderse si se esconde. El perro de asistencia evita la fuga al ir atado a su cintura y sentándose en el momento que echase a correr, además de rastrearle si se perdiese.
• Crisis sensoriales. Ruidos, luces o entornos con muchas personas... pueden generarles altos niveles de estrés y ansiedad. Un perro de asistencia les ayuda a reducirlosinterviniendo mediante lametones o carantoñas, y acortando el tiempo de duración de crisis, o rabietas.
• Incluso cuando el niño demuestra su efusividad hacia el perro, este no huye o se enfada, sino que juega con él empatizando con su afecto. (Siempre velando también para la seguridad del animal, si se diese el caso de poder causarle algún tipo daño, este sería retirado)
• Primero se realiza una entrevista en la que se valora si la familia es apta, y si existe un vínculo entre el niñx y el perro.
• El perro no se entrega a la familia antes de los dos años de edad. En ese tiempo se le cría y enseña, con entrenamientos específicos, para dar solución a las necesidades del usuario.
• Además, se visualiza si es apto para ser entrenado, y pasa controles médicos previos que aseguren su salud a largo plazo.
• Son perros de asistencia y están trabajando. No son mascotas, ni perros guía o de terapia. Llevan su peto con la documentación necesaria y una foto del usuario. (No obstante, necesitan su tiempo de ocio con la familia, correr, hacer ejercicio y relacionarse con otros animales)
• Es importante su homologación para poder permitir el acceso a zonas en las que no se permiten animales. (Aun así, puede haber problemas por la falta de visibilización del autismo, ya que al carecer de rasgos físicos, parece no reflejarse la necesidad de asistencia y se impide el acceso de la compañía perruna)

Todas estas situaciones que nos pueden llegar a desbordar como familia, con un perro de asistencia podríamos gestionarla de otra forma, y esto nos ayudaría a adquirir seguridad y confianza para realizar actividades tan normales como dar un paseo, o simplemente sentarnos en una terraza con tranquilidad. 

Es por ello que realizamos esta petición, para que se den a conocer los beneficios que tienen los animales en la interacción con niños autistas, y se ofrezcan facilidades económicas que fomenten su acceso en igualdad de condiciones. Las terapias públicas no incluyen el trabajo con animales, ni ningún especialista informa sobre la posibilidad de tener un perro de asistencia como ofrecen muchas asociaciones, cada una con sus particularidades, pero con varios aspectos en común, y nociones básicas que hay que conocer: 

Queremos con esta petición, que otras familias también conozcan la posibilidad de mejorar la calidad de sus hijxs con un perro de asistencia. Nosotros miramos y requetemiramos, y lo primero que encuentras es que un perro de estas características supera los 20.000 euros con creces, y eso ya te echa para atrás, sin embargo, cada asociación tiene sus requisitos, y nosotros nos decantamos por la Asociación DogPoint, perro de asistencia para personas con autismo, quienes nos permiten cumplir el sueño de tener un nuevo amigo para Mario y Pablo, con la recaudación de fondos paulatina aun cuando llegue a nuestro hogar.

Este es uno de nuestros principales objetivos a día de hoy, ir reuniendo todo lo que podamos para financiar el trabajo realizado con nuestro futuro perro de asistencia. Eventos, merchandising, puestos… todo lo que sea necesario para dar a conocer la labor que realizan estos animales por nuestros hijxs en el presente y para su futuro. 

Gracias a todos quienes nos apoyan y colaboran para que muchas familias puedan tener la oportunidad de convivir con un amigo incondicional, un perro de asistencia, un compañero que vea en ellos a Mario y Pablo, los niños que son, sin juzgarles por su condición.