Pregunta para Europarlamento
Somos Sheila y Gemma, y nuestro hijo Ythan es un niño trans. ¿Cuándo facilitarán el cambio de nombre en el Registro Civil a menores trans sin que tengan que pasar por cuestionarios innecesarios?
Somos Sheila y Gemma, vivimos en un pueblo de Valencia, y tenemos un hijo de cuatro años que se llama Ythan. Nació niña y se llamaba Angy, pero desde que empezó a hablar ya se refería a él mismo en masculino. Nosotras pensábamos que no sabía hablar bien y lo corregíamos. Tampoco ha querido nunca ponerse vestidos ni faldas, lloraba mucho cuando se los poníamos, o le hacíamos peinados como trenzas o coletas, se miraba al espejo y tampoco le gustaba.
Cuando empezó el colegio, que era de monjas, empezó a manifestarse más. Decía que él era muy guapo, que quería cortarse el pelo, y nosotras le seguíamos corrigiendo para que dijera “guapa” y le decíamos que se podía cortar el pelo hasta el hombro como mucho, porque si no en el colegio no lo iban a ver bien.
Hacia octubre del año pasado, Ythan empezó a decirnos que no estaba a gusto, que quería llevar ropa de chico, zapatos de chico, calzoncillos, y cortarse el pelo como sus compañeros de clase. Pensábamos que todo eso era una fase, pero cuando más tarde dijo que quería llamarse Ythan y no Angy, vimos que no era así.
Fuimos a una asociación LGTB+ en Valencia para informarnos y nos dijeron que, si lo tenía tan verbalizado con nosotras, era porque realmente lo sentía así. Entonces decidimos hablar con la tutora del colegio, y nos dijo que primero tendría que hablarlo con la psicopedagoga y con la directora misma.
La directora nos dijo que le diéramos una semana para pensarse si cortarse el pelo o no, cuando él lo tenía clarísimo desde hacía tiempo. Así que nos miramos Gemma y yo, salimos del despacho de la directora y fuimos directamente a la peluquería. Le enseñamos fotos de modelos y lo seguía teniendo claro, que quería esos peinados, esos pectorales, que no quería tener pecho.
Antes de cortarle el pelo, ya le habíamos cambiado la ropa, se puso muy contento cuando le compramos calzoncillos. Entre el cambio de ropa y de peinado, Ythan se puso contentísimo de la noche a la mañana. Ahora no para de mirarse al espejo, de decir lo precioso que está, que le eche más colonia, está muy presumido.
Lo llevamos al colegio con el pelo cortado y nos dijeron que no le podían cambiar el nombre porque los compañeros ya estaban acostumbrados a llamarle Angy. Como era noviembre, decidimos esperarnos hasta enero para cambiarlo de colegio. Se fue de allí sin que nunca le hubieran llamado Ythan. Incluso hubo niños que le decían que no podía llevar calzoncillos porque son de chicos. Ythan venía llorando del colegio, no quería volver. Mi hijo recibía bullying con tres años y la tutora decía que no podía hacer nada, que eran cosas de niños.
Ahora Ythan va a un colegio público y no tiene nada que ver: hacen talleres, sus compañeros lo tienen totalmente normalizado, y si curiosean o le preguntan a Ythan, él no tiene ningún problema en decir que es un niño trans. Antes se le veía triste, no se relacionaba con nadie, jugaba solo en el parque, y ahora está mucho más sociable, hace amigos cada dos segundos.
Sin embargo, nos queda un camino largo por recorrer y obstáculos por superar, especialmente con el cambio de nombre, que sabemos que está muy complicado. Pudimos cambiárselo en su tarjeta sanitaria sin ningún problema, ya que era muy incómodo que en la sala de espera del médico, llena de genta, le llamaran con el nombre de Angy.
Para el cambio de nombre en el Registro Civil, desde la asociación nos dijeron que habría que ponerlo delante de un juez y que podría hacerle preguntas verdaderamente estúpidas, como con qué juega más, si con coches o con muñecas, cuál es su color favorito o si se junta más con niños o con niñas. El color favorito de Ythan es el rojo. ¿Esto es un color de niño o de niña? Me parecen preguntas fuera de lugar.
Además, si en la asociación lo están viendo psicólogos, lo está viendo el médico, le contamos cuentos sobre la transición de niños y niñas y lo tiene todo claro, ¿por qué tiene que sentarse delante de un desconocido para que le haga preguntas tan banales? De momento Ythan es muy pequeño para ponerlo delante de un juez, y más para que le hagan preguntas que no sirven para nada, así que nos queremos esperar un par de años, que será más maduro.
Ante esto, nos queremos dirigir a los miembros del Parlamento Europeo para tomar medidas que faciliten el cambio de nombre en el Registro Civil a los menores trans, sin que tengan que pasar por cuestionarios totalmente innecesarios.
Ythan es un niño muy feliz porque, afortunadamente, ha podido escoger su camino desde pequeño. Esperamos que poco a poco más niños puedan tener una infancia libre y sin ningún tipo de impedimento.