Trabajar es salud y autoestima.

Pero somos algunos los que desgraciadamente no podemos, soy enferma de Síndrome de Fatiga Crónica (SFC) y es un sinvivir para mí y mi familia.

Los enfermos tenemos que pasar por el tribunal médico tantas veces, sin soluciones y con amenazas de que el país va mal y que nos van a quitar la incapacidad. Además, para cuando queremos recurrir, sólo pueden ir a juicio los que se lo pueden permitir.

Encima una vive escondida porque nadie te entiende.

Por eso pido que para los que sufrimos esta enfermedad tan poco investigada y que tanto nos perjudica, se nos otorgue la incapacidad laboral.

Eso si, gracias a los profesionales médicos que me intentan ayudar, de ellos no tengo ninguna queja.