Pregunta para Congreso de los diputados
En España necesitamos más información sobre la eutanasia y que haya un mismo protocolo de cuidados paliativos en todas las comunidades autónomas.
Soy Susana Rosell, enfermera en un hospital de Catalunya. El tema de la muerte digna y la eutanasia es algo a lo que le he dedicado mucho tiempo y sobre el que he escrito un libro. Tengo experiencia en distintos campos de los cuidados y cuando se empezó a redactar la actual ley sobre eutanasia en España me di cuenta de que no tenemos los ciudadanos ni la información suficiente para tomar las mejores decisiones con respecto al tema, y, sobre todo, que no hay formación, ni recursos, ni un consenso unificado sobre los cuidados paliativos en todo el país.
En España, estamos acostumbrados a curar y no a paliar. Cuando se estaba redactando la ley sobre la eutanasia, empecé a leerme el borrador y vi muchas deficiencias. No se estaba haciendo bien. Había también encuestas que estaba manipuladas, en ninguna se ponía si se estaba de acuerdo con la eutanasia, si no planteaban la siguiente pregunta: “¿Está usted a favor de una muerte digna?”. Claro, evidentemente si te preguntan si quieres una muerte digna dirás que sí, pero no es lo mismo ‘muerte digna’ que ‘eutanasia’.
Una muerte digna, para mí, es que si estás muriendo, tengas la oportunidad de ser atendido correctamente, que te den calmantes que sientas el menor dolor posible, pero lo hacen pasar por lo mismo. Esto también es una crítica a los medios de comunicación porque contribuyen a que se piense que son ambas cosas lo mismo. Y no es cierto.
Decidí escribir un libro: Memento Mori: una visión diferente sobre la eutanasia. Empecé a analizar el borrador de la ley y luego lo que resultó de ella. En el borrador, por ejemplo, a las personas mayores se les ponía casi como si fueran un estorbo. El borrador daba muchísimo miedo. En la primera línea ya te asustaba, porque cualquier persona que requiriera muchos cuidados, ya se le podía habilitar para recibir eutanasia. Luego, la ley ya fue algo mucho más cuidado y más suave.
En este sentido, pude darme cuenta de que en el país hay poca formación, y sobre todo formación en cuidados paliativos, una opción para hacer la vida de muchos pacientes con enfermedades crónicas más llevaderas. Así que, redactando mi libro me di cuenta de que en España solo había cuatro comunidades autónomas que tenían un protocolo como tal para cuidados paliativos.
Creo que cada persona, si tiene la información suficiente, puede tomar la mejor decisión y sus familias también cuando se enfrenten a una situación compleja en la que tengan qué analizar si optan por una eutanasia o si pueden ser todavía aptos para recibir tratamientos de cuidados paliativos.
Por eso, lanzo esta campaña de difusión, para pedir que exista mayor información objetiva de todo esto y los ciudadanos sepan lo mejor para sí mismos. Que las y los políticos se respalden con personal médico para tomar en cuenta todos estos aspectos fundamentales.
Si conseguimos el apoyo suficiente lograremos que escuchen y tomen en cuenta todo lo escrito.
Muchas gracias por leer, y a caso, compartir esta campaña.
¡Gracias!