Hola. Me llamo Teresa, tengo 43 años y hace 5 años me diagnosticaron artritis reumatoide. 

Yo iba a muchos médicos porque tenía unos dolores horribles y nadie me daba una respuesta clara, hasta que di con un profesional, a través de la Sanidad Privada, que fue quien me dijo que tenía las articulaciones afectadas. 

La artritis reumatoide es una enfermedad crónica y está dentro de las enfermedades autoinmunes que producen inflamación de las articulaciones, dolor, deformidad y dificultad en el movimiento. Incluso, en algunas ocasiones, esta enfermedad puede tener un comportamiento extraño y dañar órganos y sistemas como el corazón, el riñón y el pulmón. 

Yo he tenido y sigo teniendo dolores en las muñecas, hombros, manos y pies. Estos dolores los tengo desde hace muchísimos años, pero no sabía a qué se debían. Ahora han ido aumentando por todas las articulaciones de mi cuerpo. 

Por desgracia, la artritis me limita a la hora de hacer planes a largo plazo. He tenido que llegar a cancelar viajes porque, de repente, una semana cualquiera me pueden empezar los brotes y no me puedo mover, por lo que me tengo que quedar en la cama. 

Cuando me da un brote, el dolor que me provoca va más allá de lo que puedo sufrir diariamente. Todos los días tengo dolores y eso me ha afectado a nivel anímico, pero lo estoy gestionando un poco mejor. Tampoco me gusta abusar de medicamentos por si me acostumbro. Si me da un brote fuerte, tomo algún analgésico, pero si puedo minimizarlo reduciendo mi actividad o cualquier otra cosa, lo hago. 

Voy al psicólogo regularmente desde hace 3 años porque intenté quitarme la vida por este problema. Tenía muchos dolores, me encontraba mal, no me podía levantar, no sentía apoyo, etc. Toqué fondo, pero a partir de ahí empecé a mejorar. Físicamente puedo soportar estos dolores, más o menos, pero mucha carga de la enfermedad es psicológica. Si esa parte está controlada, estarás mejor. 

Por todo lo plasmado, lanzo la siguiente petición al Congreso de los Diputados para que haya más visibilidad e investigación para la artritis reumatoide y el resto de enfermedades invisibles. 

Las personas con artritis podemos hacer una vida normal, como el resto de personas, pero para ello, desde las administraciones, deben ayudarnos. Por ejemplo, yo tengo el cartílago de la rodilla muy mal. Para eso hay infiltraciones con ácido hialurónico que mejoran bastante nuestro estado, pero son muy caras y se hacen en la sanidad privada. 

¡Queremos que la Seguridad Social financie la infiltraciones de ácido hialurónico para reconstruir los cartílagos de las personas afectadas por artritis!