En el año 1975 yo tenia 18 años. Entonces mi posicion ideologica estaba sustentada en un espacio vital muy corto. Por esta circunstancia entre otras, afirmo que hoy no solo no aprecio diferencias con el ideal de sociedad que entonces deseaba alcanzar, sino que se ha reforzado. Hoy la libertad y la democracia; la justicia social y la igualdad; la dignidad humana y la solidaridad, a la vez que han avanzado, tambien siguen siendo sometidas a continuos ataques. En España la ideologia conservadora y la reaccionaria, en este tiempo, aparecen con frecuencia. Los recortes sanitarios y educativos; los intentos de retroceso en la democracia representativa, con la modificacion de mayorias en los Ayuntamientos; en los derechos individuales, como el derecho al aborto; en los derechos colectivos, como el derecho a la negociacion colectiva; en las garantias democraticas, como la privatizacion de acceso a la justicia; o como la concentracion de la riqueza en pocas manos, a la vez que crece el desempleo, la pobreza y la malnutricion infantil, son claros exponenetes de ello. Por lo tanto este es un tiempo en el que cualquier ideologia que defienda y proteja los intereses colectivos de la ciudadania, sus derechos individuales y colectivos, y el acceso a la redistribucion de la riqueza, necesita tanto o mas que nunca, de quienes hemos tomado opcion por ella.