Soy Adrián Caraballo, líder ambientalista de la isla más desamente poblada del mundo, Santa Cruz del Islote; y director ambiental de ECOSABIOS del Archipiélago San Bernardo. Soy apasionado por la conservación de los recursos naturales  y me enfoco en la protección de los ecosistemas y animales marinos costeros como las tortugas marinas, el pez loro, las iguanas, entre otros. También pertenezco a un grupo de jóvenes ambientalistas de San Bernardo que busca defender y proteger los corales y los manglares, apoyándonos unos a otros, para tener un mundo mejor.

Me preocupa mi isla. Además de nuestras otras labores, hemos intentado hacer un trabajo pedagógico con la comunidad porque sabemos que enseñar a cuidar el medio ambiente es enseñar a valorar la vida. Por ejemplo, mientras antes se cazaban tortugas marinas porque eran consideradas como una de las bases fundamentales de la alimentación y economía de subsistencia, ahora hemos logrado que las familias entiendan la importancia de preservar estas especies y cuidar la diversidad marítima. También advertimos y denunciamos cuando pescadores entran a zonas protegidas a pescar especies como el pez loro. Por otro lado, hemos logrado que nuestros niños mantengan una conciencia medioambiental y se preocupen por sus territorios. 

Y aunque contamos con apoyo de fundaciones, ONGs, cooperaciones internacionales y entidades responsables del Parque Nacional; necesitamos un respaldo estatal en nuestra labor. Necesitamos capacitaciones para que la comunidad y sus líderes ambientales aprendan cómo hacer siembra de mangle, limpieza submarina, de playa o liberación de tortugas marinas. Es importante que nos podamos acercar a nuevas tecnologías que nos ayuden a proteger nuestro territorio, como también lo es que se realicen estudios e investigaciones dentro de nuestras islas. 

Quisiéramos poder contar con el apoyo del Gobierno y otras entidades para la restauración y conservación de algunas islas del Archipiélago de San Bernardo que están desapareciendo. Por ejemplo, en el 2015 la Isla Maravilla, que era parte del Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo, desapareció. Ahora hay una gran preocupación en la comunidad por otras tres islas. La Isla Mangle está en un estado de erosión costera, mientras que la Isla Panda y la Isla Ceycén ya se dividieron. Adicionalmente, es importante contar con apoyo estatal para la protección de los corales porque, aunque tratamos de educar a los turistas y buscamos siempre un turismo responsable, los corales están en peligro de ser pisados y afectados. Además, corren peligro de blanqueamiento por el cambio climático y por el sedimento ocasionado por fuertes lluvias y desbordamiento de ríos cercanos como el Río Sinú. 

Necesitamos de la cooperación y colaboración de todos los colombianos para construir puentes entre los isleños y todos los niveles de la sociedad, desde los ciudadanos hasta las empresas y el Gobierno, para priorizar el cuidado del medio ambiente colombiano. Mi invitación es a que el Gobierno se involucre y esté más presente en nuestro territorio. Es importante que ellos compartan nuestros espacios, vivan nuestras realidades y entiendan los fenómenos naturales a los que nos enfrentamos a causa de la crisis climática como la erosión y la tala de mangle. 

Los invito a que apoyen esta pregunta para que sigamos cambiando nuestra mirada hacia un futuro más sostenible y responsable en donde nuestras islas sigan haciendo de nuestro país un lugar más biodiverso y maravilloso. Solamente necesitamos 350 firmas para que políticos del Congreso escuchen nuestra historia. ¿Me ayudas con tu apoyo? Firma y difunde esta campaña para que el Archipiélago de San Bernardo sea un lugar cada vez más protegido. 

Adrian Caraballo de Hoyos, líder ambiental de Santa Cruz del Islote