Hace un año estoy trabajando en una empresa que me ha entregado seguridad, respeto y oportunidades, pero esto no es la norma. Cuando comencé mi transición estaba trabajando en otro lugar, en ese momento estaba realizando el trámite legal para hacer el cambio de nombre y cuando me entregaron el carnet y lo presenté a recursos humanos, a la semana siguiente me despidieron. Las oportunidades nunca son las mismas. 

Nos toca lidiar con el mundo, con nosotrxs mismos, costear los tratamientos, enfrentar el sistema de salud, encontrar médicos que nos atiendan; además muchas veces tenemos que luchar con nuestras propias familias. A mi me echaron de mi casa y me quitaron a mis hijos. Entre todo eso, tener un trabajo estable, donde no te discriminen, es una seguridad muy importante. Con eso se puede postular a beneficios sociales, previsión médica, sistema de AFP, entre otras cosas. 

Por eso estoy trabajando en un proyecto de inclusión laboral trans. En mi trabajo uno puede participar como voluntario en proyectos o presentar una idea a desarrollar. Yo me presenté como voluntario, pero también planteé un proyecto para crear un departamento de inclusión y diversidad en la empresa, para que esta pueda ocuparse de acompañar a lxs trabajadores que están realizando su transición, entregar orientación sobre los trámites que hay que realizar con el banco, las AFP y en el sistema de salud, entre otros, por el cambio de nombre. Trámites que podrían realizarse de forma automática o de los que está oficina podría ocuparse completamente. 

Otros puntos que comprende este proyecto, es instalar baños inclusivos, contratar fonoaudiólogxs para acompañar el trabajo de la voz, porque por un tema de tiempos, muchxs de nosotrxs no podemos asistir o de alguna forma costearlo y es algo muy importante en el proceso de transición. También realizar capacitaciones sobre diversidad y género, para todxs, no solo para las personas trans. Así vamos terminando con la desinformación, los mitos y la transfobia. La educación sexual integral es importantísima para que todxs podamos sentirnos segurxs y cómodxs en cualquier tipo de espacio. 

En mi trabajo arreglaron las gráficas de búsqueda de trabajadores, donde se indica que es un lugar seguro y donde se respetan los pronombres. También me ayudaron con la tramitación y las gestiones con la casa de compensación, porque mi documento de identidad cambió, pero no en el certificado de nacimiento de mis hijos lo cual me produjo complicaciones incluirlos como cargas. Entonces la empresa se dedicó a entregarme ayuda y poder hacer los trámites correspondientes para que yo pueda acceder a los beneficios de seguridad social. 

Si yo he podido encontrar un lugar seguro para trabajar, ¿por qué otrxs no? El proyecto que estamos realizando en mi empresa debería ser una política de Estado. Hoy nosotrxs estamos trabajando con la organización Trasciende Tomé y a través de una maratón solidaria recaudamos los fondos para apoyar esta ONG mediante el proyecto social . Pero sería importante que el Estado se haga cargo de estas iniciativas y que todas las empresas incorporen este tipo de proyectos. ¿Existirá la voluntad política para realizarlo a nivel nacional?

Necesitamos el apoyo de todas y todos ustedes, para que esta petición llegue a las y los parlamentarios de la Cámara de Diputadas y Diputados, quienes nos tendrán que dar una respuesta en esta misma web. Ayúdanos haciendo clic en el botón “apoyar” y difundiendo.