Pregunta para Parlamento de Catalunya
Somos Anabel y Kat, madres de un niño y una niña. ¿Cuándo destinarán más recursos a la reproducción asistida para cubrir más tratamientos, como el método ROPA, y reducir los tiempos de espera en las listas de reproducción asistida?
Me llamo Annabel, soy de Barcelona y mi mujer Kat y yo tenemos dos hijos mellizos que se llaman David y Emma, tienen dos años y medio. Fueron concebidos a través del método ROPA (Recepción de óvulos de la Pareja), una variante de la fecundación in vitro (FIV) que permite a las parejas lesbianas tener una maternidad compartida. El método ROPA consiste en fecundar el óvulo de una de las mujeres y gestarlo en el útero de la otra. En nuestro caso, yo fui la gestante y Kat la donante.
El método ROPA no fue nuestra primera opción. Cuando decidimos ser madres, fuimos al ginecólogo por la Seguridad Social y nos inscribió a la lista de espera de reproducción asistida. Pasaban los meses y no nos llamaban, ni siquiera teníamos una estimación, no sabíamos si nos llamarían en seis meses o en tres años. Ante tanta incertidumbre, decidimos empezar el tratamiento en una clínica privada.
En un principio, probamos con la inseminación artificial (IA), fueron seis intentos, dos de ellos abortos. Como vimos que no podía quedarme embarazada mediante la IA, finalmente recurrimos al método ROPA, y lo conseguimos a la segunda transferencia. Tardamos en total unos dos años y, cuando los niños ya tenían tres meses, me llamaron de la Seguridad Social. Esto significa que, si lo hubiésemos hecho por la pública, habríamos tardado dos o tres años más.
Entre todos los intentos de IA y los tratamientos para el ROPA, sin olvidar los medicamentos, que se tenían que pagar aparte, el coste total fue de unos 20.000 €. En concreto, el método ROPA nos costó unos 5.000 € más la medicación, que es más cara, ya que tiene que hacer que aumente mucho el tamaño y la cantidad de óvulos para luego extraerlos e inseminar.
No solo la lista de espera es excesivamente larga, si no que además no dan una aproximación de cuánto tardarán en llamar, y esto hace que sea muy difícil tomar decisiones, si esperar o si recurrir al servicio privado.
Ahora estamos buscando otro hijo, esta vez con Kat como gestante y yo como donante, pero de nuevo por el método privado. Llevamos un año y más 10.000 € entre este segundo tratamiento de ROPA, cuatro transferencias y la medicación, para que vean que no es tan fácil conseguirlo, ni siquiera por lo privado.
Es por eso que me quiero dirigir a los miembros del Parlament de Catalunya, ya que somos de Catalunya y son nuestros representantes en el Parlament, para destinar más recursos a los centros públicos de reproducción asistida y así cubrir tratamientos como el método ROPA y agilizar las listas de espera, además de ofrecer una mayor transparencia respecto al tiempo de espera.
La reproducción asistida ha sido un gran paso para la maternidad, especialmente para parejas lesbianas y madres solteras. El siguiente paso será que todas las mujeres tengamos las mismas oportunidades para ser madres de forma gratuita y sin tener que esperar durante meses o años.