“Todos somos diferentes”, es el principal mensaje que deben conocer los niños/as en las escuelas para no discriminar y acosar a ningún compañero/a por sus diferencias. Cada uno tiene sus virtudes y capacidades, y en conjunto, todos debemos crear una comunidad de apoyo en la que convivimos para ayudarnos unos a otros. 

Esta es la esencia del último proyecto de hemos lanzado desde Artistas Diversos para combatir el bullying. A través del libro “El Caso de las Joyas Robadas” escrito por Mario Barguño, nacido con parálisis cerebral, e ilustrado por Kelly Arrontes, quien es técnicamente ciega al contar con solo un 8% de visibilidad en un ojo, derribamos esos mitos sobre la discapacidad en pro de la prevención del acoso escolar, ante la falta de recursos de la administración educativa en este sentido.

Es por ello que lanzamos esta petición, para dar mayor visibilidad a esta realidad sobre el bullying hacia el colectivo, y que tanto escuelas como padres, conozcan que existen organizaciones como la nuestra,sin ánimo de lucro y calificadas de Interés público, con recursos didácticos que pueden usar como material de lectura. En este caso, nuestro cuento de detectives en el que los héroes son dos niños con discapacidad que resuelven todos los casos que se les presenta, a pesar de tener discapacidad.

La idea que esos niños/as, futuros adultos, puedan acabar con la discriminación social, y sobre todo laboral, que sufre la comunidad de personas con discapacidad porque se prejuzga que no están capacitados para participar en ella. Una forma de pensar que debemos de cambiar, y la mejor manera es desde la infancia, para que esos ciudadanos sepan abrazar la discapacidad, y no la rechacen con miradas o comentarios inapropiados. ¿Por qué no existe todavía esa inclusión que se prediga en las aulas y recreos? Los datos confirman que algo no se está haciendo bien cuando la discapacidad física sufre un 26,9% de bullying, la intelectual 26,1%, un 17,5% la visual, un 15,4% enfermedades mentales y un 14,7% la discapacidad auditiva

Niños/as que resaltan con malicia diferencias físicas o mentales, acosando, y dañando la autoestima de esta comunidad. Por eso, ante esta falta de recursos en pro de una visión de igualdad, organizaciones como la nuestra, resaltan que muchas de las personas que presentan discapacidad, tienen una sensibilidad muy especial que genera una gran contribución a su entorno.

El mayor ejemplo de todo ello es el de Mario, y motivo por el que se creó Artistas Diversos. Un proyecto que mejora la calidad de vida de artistas con discapacidad, potencia su talento, fomentar su desarrollo profesional y da a conocer su trabajo para ser vendido promoviendo su inclusión. 

Mario, nació con parálisis cerebral, sufrió a coso escolar, pero su constancia en las rehabilitaciones y sus ganas de aprender, han conseguido que a día de hoy tenga una vida muy autónoma y se conozca el gran artista que es escribiendo cuentos infantiles (sobre amistad, aventuras, amor…), pintando sus emociones y tocando el piano. Su gran imaginación en todo su trabajo demuestra que la discapacidad no incapacita.

Y cuando su libro y el de Kelly llega a las aulas, luego se da la oportunidad a los alumnos/as de hacer un seminario con ambos para responder preguntas. En esas charlas, los niños/as entienden lo diferente que son unos de otros, buscan entre ellos sus diferencias, y son muy productivas y educativas para todos. El objetivo es que entiendan el mensaje, no queremos cambiar conductas, sino enseñarles a ser empáticos, a ponerse en el lugar del otro, y combatir el acoso escolar contra la diversidad para lograr en un entorno libre de discriminación. 

De hecho, en el caso de Mario, es tanta la carisma, generosidad y empatía que tiene, que en la familia nos conocen por ser la madre de Mario, predomina su persona, lo sociable que es porque se ocupa de verdad de la gente y tiene un don especial: él no hace diferencias y en eso se parece mucho a su padre.

Por eso le gusta escribir cuentos con esa moraleja, para erradicar esa discriminación tanto si se es niño, joven o adulto, y que tal vez pueda frenarse gracias a estos libros e historias. “Mis personajes son Alex y Tommy dos niños detectives, Tommy es un chico que por su debilidad en las piernas va en silla de ruedas y Alexandra, Alex, es su chofer.  Los dos se confunden mucho con las palabras, pero siempre resuelven los casos por pura coincidencia no sin antes investigar sitios y lugares que no llegan a nada.”

Así, queremos que la sociedad entienda que las personas somos diferentes, y que lo que importa es la cualificación que se tengan, la forma de ser, y no el aspecto físico, la discapacidad, que es lo que condiciona para que se les aísle.

Para que nuestro mensaje llegue lejos y los centros escolares conozcan nuestro proyecto sobre el acoso escolar hacía la discapacidad, ¿nos ayudas a ser escuchados con tu apoyo y difusión a esta petición?

Entre todo podemos hacer un mundo sin violencia ni acoso.