¿Cuándo se van a incluir propuestas efectivas en el currículum escolar de primaria y en la ESO para visibilizar el papel de la mujer en la ciencia?
Creé la cuenta de Biocosasrosas hace muchos años, pero no fue hasta la pandemia cuando empecé a retomar el contenido relacionado con divulgación científica. Empecé a subir contenido sobre científicas que no son muy conocidas aunque han hecho grandes aportaciones.
Quiero mantener el anonimato en redes porque en muchas ocasiones te puedes encontrar situaciones muy desagradables, por lo que prefiero mantenerme al margen.
Creo que es importante que se empiece a dar esta visibilidad, porque hasta hace poco, no era un tema que estaba en el debate social. Muchas veces los descubrimientos que se estudian en los colegios o en el instituto son de mujeres pero no se las nombra. Por ejemplo, la historia de la científica Rosalind Franklin que descubrió el ADN, pero el mérito solo le atribuyó a dos hombres: Watson y Crick. A ella no se la suele nombrar nunca, de hecho no aparece en los libros de texto. Si no fuera por Rosalind Franklin, no se podría haber descubierto, ya que ella consiguió una imagen del ADN muy buena y luego Watson y Crick describieron profundizaron, pero eso no lo dicen en los colegios. Ejemplos como este hay un montón.
Mucha gente se pregunta ¿y qué relevancia tiene esto? pues, el problema principal es que no hay modelos de referencia para las niñas, por lo que no se ven motivadas para seguir las carreras de ciencia.
Creo que la brecha de acceso ha mejorado en los últimos años, y se puede observar en los informes PISA, pero aún nos queda mucho por hacer porque sigue habiendo desigualdades en materias como matemáticas. No son desigualdades a nivel de capacidad, sino de acceso a este tipo de carreras.
También hay que recalcar que muchas veces el problema proviene de los estereotipos de género. Mucha gente piensa que a las chicas no se les da bien liderar equipos, o que son más familiares cuando en la ciencia, a día de hoy, no hay lugar para la conciliación. Ese es otro de los temas que se debería tratar la conciliación familiar en el sector científico. Hay que hacer un cambio a nivel cultural que tiene que empezar en la educación.
Hay que educar desde la igualdad y eso es aplicable también a los contenidos que se les ofrece a los niños y niñas. A veces son pequeños matices, como el hecho de que a la hora de estudiar el cuerpo humano se muestre solo el de los chicos y no el de las chicas. Debemos empezar a introducir este debate en la sociedad y cuestionarnos las cosas que hasta ahora parecían “normales”.