Somos Carolina Moreno y Camila Moya, creadoras de Caminado al origen, una iniciativa que organiza caminatas ecológicas antiestrés y promueve la reforestación, la economía solidaria y la protección de la madre tierra, principalmente en Bogotá. 

Nuestro proyecto nace con la idea de encontrar alternativas que nos permitieran entregar bienestar para todos. Desde las comunidades vulnerables con las que trabajamos, hasta nuestros clientes, recordando entre todos nuestras herramientas para nutrir el ser interior, como individuos y como colectivo.  Comenzamos entonces este camino con un proceso de autoconocimiento, en el que encontramos la posibilidad que todos tenemos de gestar una conexión con uno mismo que purifica la mente, el cuerpo y el espíritu y decidimos compartirla.

Fuimos ganadoras de la convocatoria nacional ZUMO+, realizada por la Pontificia Universidad Javeriana y el Centro Javeriano de Emprendimiento, donde logramos afianzar nuestra idea y potenciarla, para ofrecer el servicio de manera óptima. Llevamos un poco más de dos años creando experiencias de caminatas ecológicas antiestrés en senderos de Bogotá y sus alrededores. Ellas tienen como fin explorar por dentro y por fuera, realizando  actividades diseñadas con técnicas de psicología y medicina alternativa, todo esto para armonizar el cuerpo físico, mental y emocional.

Con el tiempo, nos dimos cuenta de que el impacto del proyecto no podía ser sólo en el interior del ser humano, pues somos un cuerpo extendido de la madre tierra, somos sus hijos y es nuestro deber cuidar a nuestras madres. Así que vimos necesario empezar a retribuir todo lo que la tierra nos había dado.  Decidimos entonces, iniciar procesos de reforestación que nos han dado la posibilidad de generar pedagogía de conciencia y cuidado con las comunidades, para que la gente pueda volver, literalmente, al origen, a proteger la naturaleza interior y exterior. A la fecha hemos logrado sembrar alrededor de 200 árboles. Por otro lado, empezamos con la creación de pacas digestoras y aulas ambientales que son espacios que permiten aprender de personas expertas en distintos saberes, desde la ciencia, la filosofía y el conocimiento alternativo.

Desde el comienzo, nuestro proyecto ha pretendido hacer uso de nuestro saber en economía para utilizar los datos y generar bienestar, para construir economías circulares, sociales, comunitarias y colaborativas, en las que hemos logrado hacer trueques, intercambios de conocimiento y cooperativismo, que nos han permitido trabajar en conjunto con otros emprendimientos, causas y personas. 

Con el paso del tiempo empezamos a trabajar con las comunidades y obtuvimos una mayor estabilidad financiera que nos ha permitido contratar a miembros de la comunidad, integrar a las mujeres y a personas aledañas a los senderos que recorremos y que se han convertido en guías del proyecto. También incorporamos materiales biodegradables en nuestros procesos, para no impactar el medio ambiente y reducir el costo ambiental de nuestro actividad. A través de procesos pedagógicos, concienciamos para evitar los plásticos de un solo uso empezando con nuestro ejemplo.
 

Compramos todos los implementos necesarios para nuestras actividades en comercios y emprendimientos locales, hacemos aportes para ayudar a reparar los senderos de nuestra ciudad y apoyamos a la comunidad, dando opciones de empleo a personas en su mayoría en condición de vulnerabilidad que no tienen opciones para integrarse al mercado laboral, ya sea por su edad, por no tener experiencia, o por ser parte de comunidades sin acceso a una educación formal. Resaltamos que nuestra empresa está compuesta en gran parte por mujeres.

Lanzamos esta campaña con la intención de visibilizar nuestra labor, para invitar a la ciudadanía a participar de nuestras caminatas, plantaciones y conectar con la madre naturaleza. Creemos que es muy importante promover mensajes de cuidado, protección y solidaridad en las comunidades y seguiremos trabajando por sembrar conciencia ambiental en nuestro país. 

Hemos evidenciado que en Colombia hay un gran desconocimiento sobre el manejo de los residuos, asunto que provoca graves problemas de orden ambiental y social. Por eso preguntamos al Congreso de la República: ¿Cuándo tendremos políticas de educación pública que permitan a la ciudadanía conocer el manejo adecuado de sus residuos? Por otro lado, hemos identificado problemas de seguridad en los senderos de Bogotá y muchas veces la fuerza pública no tiene capacidad operativa que pueda garantizar a la ciudadanía transitarlos con tranquilidad. Por eso también preguntamos: ¿Cómo se pueden incluir y empoderar a las comunidades que viven en estos sectores para que estos espacios sean seguros?

Necesitamos tu apoyo. Si alcanzamos 350 firmas ✍, los políticos escucharán nuestra historia y darán una respuesta a la pregunta. Queremos hacer visible esta realidad y promover nuestro trabajo. Ayúdanos a difundir esta campaña para que muchas personas nos conozcan y puedan unirse si desean contribuir. 

Para saber más sobre Caminando al Origen, síguelos en redes sociales como @caminandoalorigen y visita su página web: https://caminandoalorigen.com/