Gracias por la pregunta.

En Barcelona se han producido varios procesos de gentrificación,siendo el más notable el de Ciutat Vella en el casco antiguo  donde el colectivo de inmigrantes y el de nuevos ocupantes, con situaciones económicas más holgadas, participan en el mercado de la vivienda en una misma área, a pesar de que no accedan a los mismos submercados por la desigualdad de condiciones económicas y sociales.

Ante esta situación, otras ciudades europeas como Paris, apuntan tanto a incrementar las opciones de arriendo subsidiado como a asegurar zonas residenciales con servicios y equipamientos en el centro histórico a personas de bajos y medios ingresos, evitando su expulsión a la periferia desde barrios progresivamente habitados por grupos de altos ingresos.

Pero segun tu pregunta, imagino que te refieres al  proyecto 22@Barcelona que ha generado contradicciones urbanas, y consecuencias económicas y sociales para los vecinos y las empresas ubicadas en el barrio de Poblenou. Un proyecto en el que el Ayuntamiento y sus políticas de reconversión han sido los principales agentes de intervención y producción de gentrificación en la zona. 

Considero que esta cuestión es competencia del Ayuntamiento que en el ejercicio  de su autonomía local debe tomar las medidas oportunas para evitar la expulsión del los vecinos tradicionales de los barrios afectados por procesos de gentrificación ya sea por la actividad turística o tecnológica. Considero que una posible solución es la creación de espacios en los que optar por diversidad y solidaridad, para luchar contra la exclusión y en darle a aquellos residentes los servicios y oportunidades que en otro tiempo no pudieron disfrutar.