¿PARA CUANDO LA REGULACION DE LA INMIGRACION?

La inmigración, entendida como desplazamiento de población trabajadora desde un país en desarrollo y con escaso trabajo a otros países más desarrollados que necesitan mano de obra, constituye un fenómeno social universal, de efectos positivos para todos en cuanto beneficia a los dos polos de la inmigración, el país de origen y el de destino. A los primeros inmigrantes les sigue normalmente su familia y sus amigos, y aunque algunos suelen mantener la ilusión del regreso, la mayoría de ellos, y sobre todo sus descendientes, se quedan en el país de destino, contribuyendo a configurar una sociedad más compleja. La inmigración no afecta pues únicamente al trabajo –aunque sea su causa inicial– sino también a la vivienda, la reagrupación familiar, la sanidad, la educación de los hijos, la relación entre culturas y religiones, la participación política y social... en definitiva, a todos los aspectos de la propia sociedad. Cuando la inmigración alcanza un volumen como el que tiene España actual, el cambio se produce en la propia sociedad, aunque la mayoría de los inmigrantes están de paso hacia otros países como Francia, Bélgica.

El concepto de ‘inmigración’ es acompañado hoy día por una gran cantidad de afirmaciones; algunas de ellas las englobamos en el círculo de los tópicos, de las ideas preconcebidas, otras son imágenes creadas y elaboradas por los mas-media tan importantes e influyentes en la sociedad en la que nos encontramos, y otras restantes forman parte de ideas ciertas, de ideas verdaderas que miran a este fenómeno con objetividad, neutralidad y atendiendo a hechos históricos que lo normalizan.

Ante todo para el tratamiento de este tema hemos de cumplir 4 requisitos importantes, básicos y que atienden a los principios morales y éticos que como personas no deben perderse; estos son, sensibilidad en el tratamiento de temas relacionados con la inmigración con el fin de mejorar la situación de esos colectivos; formación sobre la raíces que provocan los problemas sociales; conocimiento jurídico, histórico y social de los problemas que incumben al colectivo inmigrante; evitar la relación y concepción tópica de ‘inmigración = delincuencia’. Con esto no se persigue nada más que fomentar en todo momento la igualdad social evitando en lo posible y si no es necesario detenernos en el origen étnico o geográfico de cada persona.

Es de obligación para todos superar tópicos y afirmaciones que pueden ser tachadas de aberrantes en relación a este concepto de inmigración. Es un error pensar que la inmigración es un fenómeno nuevo puesto que hemos de remontarnos a 4 millones de años atrás, desde que aparecen los primeros primates, para hallarlo presente ya en la sociedad; toda la historia de la humanidad es un movimiento migratorio llegando a sorprender el hecho de que no exista ningún protocolo internacional que garantice la seguridad en la migración de personas habiendo para las aves hasta más de trece. 

Es también falsa la afirmación que asegura que no se había dado antes una masa de movimientos migratorios tan grande como la que vivimos en la actualidad. Entre 1970 y 2003 se dieron 10 millones de movimiento migratorios extracomunitarios (con o sin papeles), llamando la gente a este fenómeno invasión, avalancha, ... Pues bien, todos estos conceptos quedan pequeños si aportamos los siguientes datos: entre 1870 a 1912, se produce la ola de inmigración más grande en la historia de Europa con 60 millones de personas como protagonistas; esos 60 millones de personas eran blancos y cristianos quedando estos datos perfectamente demostrados en la historia con causas y razones y de una forma científica, mientras que hoy no se explica con rigor, ni se dan detalles a cerca de las migraciones que se producen en la actualidad, por lo que queda totalmente claro que sólo se exponen razones cuando los que nos movíamos éramos ‘nosotros’. 

Forma parte también de la falsedad que rodea a este tema el que se afirme que la inmigración que se da en la actualidad sigue siempre la misma dirección: de los países pobres a los ricos, los cuales a su vez no pueden soportar tal carga de extranjeros. Pues bien, el informe de la ONU a cerca del desarrollo humano situó a la cola de la relación de países inmigrantes a Centro América, Grandes Lagos Africanos y a Pakistán/Irak; estas tres zonas son consideradas de las más pobres del planeta y, paradójicamente, son los países que mayor número de inmigrantes, refugiados y asilados poseen; es más, la inmigración, si se analiza el proceso históricamente se produce de sur a sur y no de sur a norte. 

Finalmente, otras de las ideas extendidas, y que compete en gran medida a la economía social, es que el movimiento migratorio de la actualidad influye negativamente sobre nuestro mercado laboral, el tópico cada vez más extendido de que “vienen a quitarnos el trabajo”. Esta, sin duda, es la mayor aberración cometida en torno al fenómeno migratorio. Los inmigrantes que llegan a España se dedican a ocupar puesto de trabajo que los españoles no quieren ocupar, sufren la explotación de determinadas personas que se dedican a sacar provecho de la difícil situación en la que dichos colectivos se encuentran para obtener lucro propio e incluso para el montaje de negocios a costa de estos. Además, a pesar de la entrada en vigor de la Nueva Ley de Extranjería, si el consulado no quiere facilitarle los papeles a un extranjero a pesar de que éste cumple todos los requisitos exigidos, simplemente no se los facilita. Sería correcto exponer las 2 vías de trabajo que se dan en España al sector inmigrantes; por un lado, contingentes o cupos que son puestos que da el Gobierno porque los españoles no los solicitan como construcción, y fundamentalmente en mayor medida, trabajos de temporada, como recogida de fresas, frutos rojos, servicio doméstico etc.…. 

Es todo esto lo que hace que la sociedad española contemple a la inmigración como un verdadero problema, el tercero tras el paro y el terrorismo. Pero los medios de comunicación ayudan en gran medida a la elaboración y convencimiento de esta idea con titulares sensacionalistas, discriminatorios y erróneos, que fabrican ideas que permanecen en la sociedad y que dificultan la adaptación e incluso la vida, aún más, de los inmigrantes residentes en nuestro país. Se olvida que, aunque en España según todos los estudios realizados no hay ninguna actitud xenófoba explícita, este país que en la actualidad es claro receptor de inmigrantes, fue históricamente emisor de emigrantes en un proceso de cambio claro del país. De este modo cabe tener en cuenta no sólo este punto de españoles históricamente emigrantes para tener un mayor entendimiento del fenómeno migratorio, sino también otros tantos como las causas de este proceso, breve análisis de la Ley de Extranjería o el análisis que se hace de la inmigración en los medios.

Aqui debe entrar la economía social como organizaciones como Fundación de Parados Mayores de 40 años, PM40, que tiene como lema desde su nacimiento, “por la Inserción y contra la Exclusión”. PM40 trabaja para la adaptación e inserción de este colectivo inmigrante en nuestra sociedad, en nuestro entorno laboral, en nuestra economía social. Son diversas la nacionalidad que hallamos entre los socios y colaboradores de esta Fundación PM40 la cual ha sentido siempre un gran compromiso para con este sector de nuestra sociedad. De este modo, se da la presencia de extranjeros en todos y cada uno de los proyectos llevados a cabo por nuestra Fundación a lo largo de sus más de 20 años de historia; estos son, la recogida de la naranja amarga, el entrañable proyecto de los Reyes Magos y Papá Noel en casa, Cuidadores Sociales de Barrio, Talleres de Empleo de todo tipo, presencia importante también en la Oficina de Integración Laboral (O.I.L), como Cuidadores de Parques y Jardines, en el importante proyecto VOVIS (en el que un 40% de los colaboradores son extranjeros insertando PM40 en dicho proyecto a todo inmigrante que se registra como socio de esta Fundación, procedimiento que es totalmente gratuito), los servicios de portería de casetas en la Feria de Abril o los servicios en Semana Santa y Feria (proyectos en los que un 80% de las mujeres seleccionadas son extranjeras y más concretamente marroquíes requiriéndose hasta 500 personas para la realización de estas tareas), o el parking de vehículos pesados Torre Triana, entre otros muchos. Queda todo esto hecho, pero no cesaremos en nuestro lema y trabajaremos para seguir insertando laboralmente, económicamente, humanamente a este sector de nuestra sociedad. Se presenta, por tanto, este fenómeno de la inmigración como un reto para la economía social en la cual este colectivo extranjero supone y desempeña un papel algo más que importante. Y es por ello que nuestra Fundación PM40 se hace eco de una necesidad, apoya una causa en su sector dentro de la economía social de nuestro país. 

Mas de 4 millones de españoles fuimos a buscar a otros países una vida mejor, 

Hoy queremos trabajadores y vienen seres humanos.

¡Ellos tambien vienen buscando esa vida mejor... DÉMOSELA!