Pregunta para Asamblea Regional de Murcia
Soy Diana y sufro dolor crónico ¡Necesitamos un protocolo de atención específico para las pacientes con dolor crónico, en la atención primaria, especializada y de urgencias!
Murcia. Mi nombre es Diana Torrecillas, tengo 39 años y soy paciente activa porque tengo, entre otras patologías, endometriosis profunda, dolor pélvico crónico, neuralgia bilateral de los nervios pudendos (enfermedad rara número Orpha 60039), las cuales me generan dolor crónico neuropático, denominado la muerte en vida. Además, soy Ayudante de Presidencia y Vocal de la ADOPEC, una asociación sin fines de lucro, cuyo objetivo es visibilizar el dolor pélvico crónico que padecen sus integrantes.
Ésta enfermedad me incapacita y disminuye mi calidad de vida de forma significativa. No sólo por el dolor físico, sino también porque ha llegado a provocar una alteración psicológica. Hay días en los que no puedo realizar tareas cotidianas, como llevar a mi hija al colegio. No puedo orinar ni defecar, no puedo estar sentada mucho tiempo ni caminar tanto.
El Dolor Crónico constituye uno de los problemas de salud más relevantes para la sociedad actual para hombres y mujeres. Puede llegar a ser causa de sufrimiento, incapacidad y pérdida de productividad en la población laboral. La Sociedad Española del Dolor estima que el 21% de la población sufre dolor crónico, es decir, más de seis millones de españoles.
Soy una de las tantas españolas que lucha para vivir sin dolor. Tengo dolor en las paredes vaginales, en las ingles, sacro-coxis y región lumbar, calambres y contracciones vagino-anales, fatiga crónica y fibromialgia. Todo esto implica que haya noches en las que no puedo dormir.
La Organización de la Salud (OMS) determinó que el alivio del dolor es un derecho humano fundamental y que incurre en una falta ética grave profesional de la salud que impida a un ser humano el acceso a la posibilidad de alivio del mismo. Además, según La Constitución Española (1978) en su artículo 43. "Establece el derecho a la protección de la salud y a la atención sanitaria de la salud a todos los ciudadanos”, y según la Ley General de Sanidad (Ley 14/1986) “garantiza una prestación de una atención integral de la salud procurando altos niveles de calidad debidamente evaluados y controlados.”
Pero lo cierto es que la atención primaria sanitaria y los equipos de emergencia no están actualizados ni preparados profesionalmente para los protocolos de atención y actuación para con pacientes crónicos de dolor y polimedicados en casos de brotes de hiperalgesia de difícil control. Tampoco para la derivación a equipos multidisciplinares sobre el dolor pélvico crónico.
Necesitamos que eso cambie en la comunidad autónoma de la Región de Murcia. Que generen una formación específica sobre dolor pélvico crónico al personal sanitario de atención primaria. También, que se lleve a cabo un abordaje multidisciplinar de atención a la paciente, crear unidades funcionales en los centros públicos, una atención integrada y coordinada entre la atención primaria y la especializada garantizando así, un trabajo interdisciplinar que acorte tiempos para tratar las patologías y poder acceder a terapias y tratamientos de prevención.
Es importante, incrementar la ayuda en la investigación, prevención y tratamiento del dolor crónico para reducir la media de años que una mujer suele tardar en recibir el diagnóstico, así como conseguir métodos de diagnóstico menos invasivos, un diagnóstico precoz y una mejora en el tratamiento.
Necesitamos que se generen campañas de sensibilización y concienciación contando con el ámbito público, privado y asociativo con campañas de concienciación.
¡Ayúdanos apoyando y difundiendo!