Pregunta para Parlamento de Andalucía
Soy superviviente de un TCA que arrastré durante 12 años. ¿Por qué no se fomentan medidas y herramientas en los centros educativos (colegios e institutos) para prevenir y combatir este tipo de conductas?
Me llamo Efi Carrasco, tengo 33 años, vivo en Cádiz y soy superviviente de síndrome por atracón, un trastorno de la conducta alimentaria (TCA) que arrastré durante 12 años.
A mis 18 años, los problemas en casa y el estrés que no supe canalizar, desencadenaron una adicción por la comida. La falta de apoyo psicológico y la escasez de información provocaron que esa adicción fuese a más, convirtiéndose en una enfermedades la cual me he recuperado hace tres años, pese a las continuas recaídas, para las cuales es esencial la ayuda psicológica.
Ahora soy Técnico superior en dietética y ayudo a personas a cambiar sus hábitos y tomar acción sobre posibles TCA. Además, desde mi experiencia, divulgo información lo más real posible a través de mis redes sociales. Y es que, muchas veces, la información que recibimos a través de estos canales es engañosa y nos hace caer en este tipo de problemas. Un hecho muy preocupante ya que cada vez afecta a más niños/as.
En consulta veo que la gran mayoría de estos problemas se inician a partir de los 12 años. No obstante, ya en edades más tempranas he podido escuchar algún tipo de comentario que te hacen saltar las alarmas. Sin ir más lejos, mi hija de 5 años me ha preguntado alguna vez que si tiene la “barriga más flaca”.
La información y la formación son claves para prevenir este tipo de conductas. Las instituciones deberían fomentar en los centros educativos (colegios e institutos) la educación nutricional. Debemos ser claros con los/as más pequeños/as, ya que, si a esa edad no les enseñamos, difícilmente podremos hacerlo luego.
Algunos colegios de Cádiz han fomentado el menú saludable a la hora del patio. En concreto, han establecido un horario a través del cual fomentan la alimentación saludable, obligando a los/as niños/as a comer un tipo de alimento concreto.
No obstante, en los institutos, lugar donde encontramos más problemas de TCA, este tipo de iniciativa no se contemplan. Quizá deberíamos empezar por ahí. Se deben implementar medidas y herramientas sobre educación nutricional a lo largo de toda la etapa educativa.
Ante esto, como madre, expaciente y profesional de la nutrición, me dirijo a los/as miembros/as del Parlamento de Andalucía, para que sean conocedores de esta problemática y tomen medidas al respecto.