Pregunta para Senado
No quisieron contratarme luego de saber que soy trans. ¿Cuándo se asegurará una integración real de la comunidad trans al mundo del trabajo?
Mi nombre es Étienne, vivo en Valencia y soy un hombre trans. Hace unas semanas tuve una entrevista de trabajo en una reconocida cadena de comida rápida. La entrevista fue genial, la chica incluso me comentó que de seguro entraba, que solo esperará la confirmación durante esa tarde. Me sentía feliz porque les gustó mucho como me expresaba, mi trato con la gente y me aseguró que querían que formase parte del equipo.
Me puse a ello y les envié todos mis datos. Aquí vino el problema: al enviar mi DNI, cuenta de seguridad social y certificado bancario, quise aclarar que en el banco viene un nombre y en el DNI otro, pero que todo estaba justificado en mi papeleo de cambio de nombre, el cual también les envíe para ahorrarme problemas. De la empresa solo me responden: “Oh, vale”.
Luego de eso vino el silencio total. Llega el sábado y no se crea el grupo de WhatsApp que me habían comentado para coordinar la capacitación del siguiente lunes. Después el domingo, y nada, pienso que habrán tenido algún contratiempo y me dirán algo. Finalmente, sin respuesta aún, el lunes a media tarde les escribo, recordándoles que cuentan conmigo. Nuevamente, la respuesta es breve: “Si, te hablo uno de estos días”.
El miércoles, aún sin respuesta, me encuentro con que el restaurante ya está abierto y ha comenzado todo el mundo a trabajar. Finalmente, recibí la tan esperada llamada, en la que me ofrecen un turno inventado (durante la primera entrevista me mencionaron los horarios disponibles en todos los restaurantes de la cadena). La oferta no contemplaba las 8 horas de descanso legales, y era un turno partido de media jornada del cual nunca había escuchado.
“Sé que seguramente no lo puedes aceptar”, me aseguran del otro lado de la línea. No me lo creía, me quedé con las ganas de decirles que llevaba una semana esperándolos, que había rechazado otra oferta y que me fastidiaba mucho. Finalmente, lo que querían era que yo les diera la negativa para que no pareciera que eran ellos los que me rechazaban.
Estamos hartos de que siempre sea lo mismo. Por lo mismo, pido a los miembros del Senado que se tomen medidas que protejan a la comunidad trans en entornos laborales y aseguren la no discriminación del colectivo. La tasa de paro entre la comunidad trans es altísima, e incluso triplica la de las personas cis. Es hora de tomar acción.
No es que solo me fastidie el hecho de perder un trabajo, es que estamos en el siglo XXI, en el mes del Orgullo, cuando empresas como esta llenan sus redes de banderas LGTBI y publicaciones en redes sociales sobre el tema.
Es el mes del Orgullo, porque feliz será el día en el que consigamos nuestros derechos.