Pregunta para Parlamento de Catalunya
Durante los últimos años he notado como ha empeorado la sanidad pública. ¿Cuándo volverá a la normalidad?
Hola, me llamo Fátima, tengo 23 años y tengo parálisis cerebral. Nací en Marruecos y el parto fue en casa. Sufrí una hipoxia neonatal, me faltó oxígeno al nacer y eso me provocó la discapacidad que llevo sufriendo toda mi vida. Actualmente, vivo en Barcelona y trabajo de administrativa, sin embargo, me ha costado mucho trabajo y esfuerzo llegar hasta aquí.
Nací en Marruecos y estuve allí hasta los 6 años, no obstante, como allí la sanidad no tenía los recursos que yo necesitaba, mi tío me trajo a España. Una vez en Barcelona, me hicieron el diagnóstico oficial de parálisis cerebral y empezaron a tratar los daños que ésta me había provocado con distintas terapias.
Pasé mi infancia en un centro de menores porque, por diferentes circunstancias, me quedé sola. Solo puedo tener palabras de agradecimiento hacia los profesionales que me han tratado, ya que gracias a su trabajo, he avanzado muchísimo y he podido llegar a ser quien soy ahora. Durante esta etapa, me realizaron diferentes operaciones en las piernas con postoperatorios muy complicados. Un total de once intervenciones en un día. Fueron un éxito y mejoró mucho mi estado de salud.
Cuando finalicé las pruebas preparatorias de la ESO, hice unos exámenes para entrar en un ciclo de grado medio de administrativa y, una vez más, lo conseguí. Estudiando el ciclo superior hice una entrevista y pasé todos los procesos de selección hasta que finalmente me llamaron para empezar a trabajar.
Desde entonces, trabajo en las oficinas de transporte público de Barcelona, llevo una vida como la mayoría de personas y me esfuerzo todos los días por superarme. Soy fuerte porque la vida me ha hecho serlo, pero eso no quita que me duelan ciertas situaciones.
En los últimos años, y desde que empezó la pandemia, más todavía, la calidad de la sanidad pública ha empeorado bastante. Yo siempre he estado muy contenta con los servicios sanitarios. Como he dicho antes, soy quien soy gracias a los sanitarios, profesores, educadores, monitores, que siempre he tenido a mi lado. No obstante, hace relativamente poco, tuve que ir a poner una reclamación a mi hospital porque después de un año, no me habían hecho ninguna consulta de control. Finalmente, no la puse, porque viendo mi situación, en ese mismo momento, me vio el doctor.
Por otro lado, la concienciación social en cuanto a la convivencia con personas con diversidad funcional es nula. En el colegio siempre tuve compañeros menores que yo por mis dificultades de lenguaje. Me apuntaron a un esplai para mejorar mi socialización y poderme relacionar con niños de mi edad. Cada vez que salía a la calle, me sentía como un “bicho raro”, aunque eso no me impedía seguir hacia adelante. Creo que una de mis virtudes ha sido el no rendirme nunca.
Mi petición gira en torno a la mejora de la calidad de los servicios públicos en Cataluña y también en torno a la importancia de la educación inclusiva para que ningún niño o niña tenga que sentirse desplazado por el simple hecho de ser diverso. También me gustaría mandar un mensaje de ánimo a todos los niños que estén pasando por una situación parecida a la que yo pasé hace unos años: podéis hacer todo lo que os propongáis con esfuerzo, paciencia y sin rendirse jamás. Persigue tus sueños!!!!