Somos Feminarian S.L., una escuela e-learning de formación feminista nacida en Cádiz en el año 2018 con el objetivo de crear consciencia feminista a través de la educación. 

Hace bastantes años que estamos presentes en la red social Instagram compartiendo contenidos y divulgando información. En los últimos 5 años tomamos conciencia del potencial que tenía esta red social y de que podíamos llegar a mucha gente con nuestros contenidos y poder transformar la sociedad.

Creemos que el concepto de educación menstrual todavía está en construcción. Nosotras desde la Escuela hemos trabajado mucho por darle forma a la metodología de la educación menstrual porque realmente todavía estamos muy lejos de que exista una verdadera consciencia sobre la importancia que tiene la educación menstrual en la sociedad. 

Todavía existen muchos mitos y falsas creencias en torno al ciclo menstrual, en las escuelas se pasa de puntillas, como sucede con la educación sexual, y en las familias la visión que existe a nivel general es un poco también el reflejo de todo esto.

Sí que es cierto que gracias al activismo menstrual cada vez son más las personas y familias interesadas en educar menstrualmente a niñas y niños, sin embargo, no existe por ejemplo un compromiso institucional en la misma línea. 

La educación menstrual es importante porque ayuda a las mujeres y personas menstruantes a recuperar sus cuerpos, a conectarse con ellas mismas, a autogestionar su salud o a vivir desde el placer, entre otros muchos beneficios. 

Por ello, debe ser transversal al currículo educativo, debe ser integral y biopsicosocial, es decir, considerando todas las dimensiones de la persona y, por supuesto enfocándonos siempre en conseguir la igualdad de género y la eliminación de las desigualdades y violencias hacia las niñas y mujeres. 

Por ejemplo, normalizar el dolor menstrual es violencia patriarcal porque en los procesos de socialización de género, una de las enseñanzas que se hacen tanto a niñas como a niños es que los procesos vitales de las mujeres son sucios, dolorosos, molestos… El patriarcado nos enseña que parir duele, que el coito duele, que la menstruación duele…Que ser mujer es un engorro y que la vida se acaba cuando ya no eres fértil. 

Todo esto para que vivamos con miedo o rechazo nuestros cuerpos y procesos vitales y nunca desde el gozo y el placer de ser mujer, de menstruar, de parir o de envejecer.

Y si la sociedad aprende que el dolor menstrual es normal, ¿para qué molestarnos en investigar el origen del dolor menstrual? Algo que no sucede en otro tipo de dolores por muy frecuentes que sean. Está claro que no interesa que la sociedad tome consciencia de que es posible menstruar sin dolor o vivir nuestros procesos vitales de manera natural sin toda esa carga de género violenta sobre nosotras.

Por lo tanto, iniciamos esta campaña de firmas con el objetivo dirigirnos a los políticos del Congreso de Diputados para preguntar sobre qué medidas va a tomar para implantar la educación menstrual, que es la única herramienta que puede desmontar uno a uno todas estas estrategias patriarcales que perpetúan la violencia hacia las niñas y mujeres.