Pregunta para Congreso de los diputados
Yo lo tengo claro, haría cualquier cosa por salvar una vida. ¿Y tú?
Hola a todos,
Soy Francisco, granadino de nacimiento y almeriense de corazón. Y desde hace muchos años lucho cada día para que cuando un médico tenga que informar de un diagnóstico de leucemia infantil diga: “Tranquilo, es solo leucemia”. En este año 2021 llevo más de 1800 km recorridos a pie para que el cáncer infantil en general y la leucemia infantil en particular sean dentro de poco una enfermedad 100% curable.
Y pensaréis… ¿Por qué? ¿De dónde viene esta necesidad de concienciar, de ayudar, de sumar? Pues bien, cuando tenía 14 años a mi padre le diagnosticaron cáncer de pulmón, y años más tarde perdí a un amigo por la misma enfermedad. Y yo solo alcanzaba a pensar: “Si ni siquiera una persona adulta puede asimilar tal ardua situación, ¿por qué un niño tiene que hacer frente a esto?”. ¿Por qué personas tan sumamente buenas tienen que sufrir todo esto? Si no lo entienden personas adultas, imaginaos un niño… Ellos son felices de esa manera porque no conocen otra realidad, pero los que hemos podido disfrutar de la vida sin trabas, sanos, sin batas de hospital, sin sondas, sin confinamientos… Y de ahí mi necesidad de LEVANTARME Y LUCHAR, por todos aquellos niños.
Donación de médula ósea e investigación. Esas son las dos claves por las que pasa mi petición y mi lucha. ¿Y tú? ¿Te sumas?
¿Acaso no estarías dispuesto a salvar una vida? La donación de médula no es lo que era antes. Ni tu vida ni la de tus familiares corren peligro, tu integridad física no corre riesgo y, sobre todo, puedes estar salvando la vida de alguien…
Y ustedes políticos, ¿cuándo tomarán en serio el presupuesto destinado a la investigación de esta enfermedad? ¿Cuándo invertirán en salvar vidas?
Por el momento, yo hago mi parte. Más de 1800 km recorridos en lo que va de año (1 euro/km es donado a Uno entre cien mil), y mucha gente me pregunta: “¿Cómo vas a llegar a viejo así?”. ¿Sabéis qué? Vivo el presente, disfruto de lo que hago hoy porque el mañana ya se verá. No estamos salvados de nada. Así que lo que quieras, ¡hazlo con el corazón!