¡Hola! Mi nombre es Fredy Andrés Ramírez Cruz, vivo en la ciudad de Bogotá, tengo 23 años, soy ingeniero y activista ambiental. 

Una de los principales problemas ambientales que afecta gravemente a la ciudad es la contaminación hídrica del río de Bogotá, que tiene graves consecuencias para la biodiversidad acuática, la alteración del ecosistema y la salud ambiental y provoca nuevos problemas ambientales y sociales. Por ejemplo, hay una preocupación por el riesgo que tiene la población de desarrollar cáncer como consecuencia. Las comunidades ubicadas en los barrios que están cerca de la ribera del río son especialmente vulnerables debido a la contaminación por metales pesados. También tienen riesgo de padecer enfermedades respiratorias, afecciones en la piel y problemas en el sistema gastrointestinal.

De igual forma, hay un problema social delicado debido a la ausencia de autoridades que garanticen el bienestar de las comunidades asentadas cerca del río y a la falta de programas que trabajen con las curtiembre y las industrias cuyas actividades contaminan el agua.

El río Bogotá desemboca en el Magdalena, el más importante del país, y vierte en él toda la contaminación que va desde la capital. Las repercusiones ambientales y sociales son muy graves, pues no solo se pone en peligro la biodiversidad acuática, sino también provoca problemas en varias actividades económicas que hacen uso del recurso hídrico y su servicio ecosistémico.

Necesitamos hacer un llamado a tomar conciencia y sensibilizarnos sobre el cuidado de nuestras fuentes hídricas. Debemos ser conscientes del uso que le damos. Necesitamos crear buenas prácticas ambientales desde nuestros hogares y las instituciones educativas para frenar este problema. Hay que hacer énfasis en la necesidad de separar los residuos, no desechar aceites ni detergentes en las tuberías y sifones, invitar al consumidor a usar jabones y productos de limpieza naturales, reciclar los metales pesados y usar el agua de manera responsable. 

Hoy en día hay una sentencia emitida por el Consejo de Estado que insta a descontaminar el río de Bogotá. Por eso, mi petición Congreso de la República es que no solo se cumpla esa sentencia, sino que se busquen soluciones de raíz. ¿Qué hace falta para empezar a descontaminar el río Bogotá a fondo? Únicamente con acatar este fallo no se logrará el objetivo de salvar esa fuente hídrica. Se necesita educar a la sociedad y, entre todos, recuperar el río. 

Debemos aprender de todos nuestros servicios ecosistémicos, respetar y crear conciencia de todo lo que nos brinda nuestro planeta. ¡Por eso te invito a apoyar nuestra petición! Con 350 firmas, será presentada a los políticos del Congreso para que la respondan en la página de Osoigo. Únete y sé parte del cambio. ¡El agua te necesita!