Los Médicos Internos Residentes de Castilla y León hemos convocado una huelga indefinida el 22 de setiembre para que nuestras condiciones laborales mejoren, a menos que lleguemos a un acuerdo con la Consejería.

Los MIR (Médicos Internos Residentes) pasamos años estudiando para obtener una plaza y formarnos como especialistas en los hospitales. El objetivo de nuestro contrato es formarnos, pero terminamos haciendo todo tipo de tareas, muchas veces sin supervisión alguna, y con unas condiciones laborales muy precarias. 

Nos vemos obligados a hacer largas jornadas de trabajo, con unos descansos breves y muchas veces compartiendo camas, en espacios que no cumplen con las condiciones higiénicas adecuadas. 

Muchos de nosotros solemos trabajar más de 50 horas semanales. Además, en muchas ocasiones, después de una guardia de 24h tenemos que hacer una jornada de 8 horas más. Hay veces en las que trabajamos 36 horas ininterrumpidas. Muchos médicos entran a quirófano sin haber descansado, lo que supone un peligro para el paciente y para el médico. Además de todo ello, nuestro salario es ínfimo si tenemos en cuenta la cantidad de horas trabajadas y las responsabilidades que llevamos a cabo.

Los residentes estamos bajo la supervisión de un tutor, que se encarga de que vayas cumpliendo la formación adecuada. Los demás profesionales deben de estar dispuestos y pendientes de la formación de los residentes. Sin embargo, esto no suele ser así. Muchos residentes quedan supervisados por otros residentes mayores que, aunque tienen más experiencia, no tienen la calificación necesaria como un adjunto. Lo más grave de ello, es que este sistema se ha normalizado. 

¿Qué pedimos?

• A nivel formativo, que se cumpla la supervisión del docente y no se deje al residente actuar por cuenta propia sin supervisión. También consideramos que las rotaciones externas (cuando nos desplazamos a otro hospital nacional o extranjero para aprender) sean de calidad y remuneradas. Además, exigimos unas comisiones de docencia que funcionen y que podamos elegir.
• A nivel laboral, exigimos que se cumplan los tiempos de trabajo tal y como exige la ley. Pedimos que se cumpla el tiempo de descanso y libranzas después de las guardias.
• Lugares de descanso adecuados y con las condiciones higiénicas óptimas.
• Mejoras retributivas, ya que tenemos unos salarios ínfimos en relación a nuestras responsabilidades. Castilla y León es una de las comunidades donde los MIR tenemos los salarios más bajos. También consideramos que el salario debería de aumentar gradualmente cada año de residencia.
• Garantizar los permisos de maternidad y paternidad para la conciliación.
• Que se reconozca los trienios trabajados.

Después de la Pandemia causada por la COVID-19, los MIR hemos dicho basta. Somos imprescindibles para nuestra sociedad, pero no podemos seguir ejerciendo con unas condiciones laborales tan precarias. Si nosotros trabajamos en buenas condiciones, toda la sociedad se verá beneficiada. 

En Castilla y León, los MIR hemos convocado una huelga indefinida para el 22 de setiembre, a menos que lleguemos a un acuerdo con la Consejería. 

Necesitamos un Convenio Colectivo que nos ampare y nos proteja. ¡Apoya nuestra causa! #ConvenioMIRYA