Pues una ciudad donde se encuentren cómodos sus habitantes, y donde los visitantes noten la hospitalidad y la calidad en el trato humano. Una ciudad limpia en su suelo y fachadas, lo más peatonal posible para el espacimiento de los ciudadanos, donde las instituciones alejadas de soberbias luchas pretendan la consecución de metas fijadas por todos. Donde el borde urbanístico esté resuelto y se construyan espacios para aparcar vehiculos y se pueda acceder a pie o en transporte público a su centro. Una ciudad para pasear y disfrutar, con un comercio dinámico y una hostelería, anfitriones de turistas que pernoctan en sus hoteles antes y después de visitar la Alhambra y restantes monumentos. Esa ciudad es Granada, y es un modelo a conseguir por todos.