Me llamo Indira, tengo 21 años y vivo en Cádiz. Actualmente estudio un doble grado en Publicidad y RRPP y en Turismo. Cuando llegué a la Universidad vi un mundo abierto, algo que durante mi infancia y adolescencia no había tenido la oportunidad de imaginar. 

Soy una persona bisexual, lo soy desde pequeña, no obstante, no lo reconocí hasta que cumplí los 18 años, momento en el que pisé la Universidad. Las personas que formamos partes del colectivo LGTBIQ+ nos vamos dando cuenta de ello a medida que vamos creciendo, sin embargo, en muchas ocasiones, pensamos que lo que nos pasa está mal. 

El desconocimiento y la falta de información son dos de los grandes problemas en estos casos. Los centros educativos deberían fomentar la educación en diversidad y en igualdad desde que lxs alumnxs son pequeñxs. 

Asimismo, se deben realizar más charlas y talleres basados en temas sociales. Pero, sobre todo, tratar esos temas con normalidad. Que desde pequeñxs entendamos que todxs somos iguales indiferentemente de nuestra identidad o condición sexual, ayudaría a las personas del colectivo a no sentirse oprimidas y poder expresarse con total libertad. 

No obstante, sé que con eso no basta. La primera vez que mostré libremente como soy, recibí algún tipo de crítica, me llegaron a decir que si estaba enferma. Las personas que hacen este tipo de comentarios basan sus ideales en la educación que recibieron, de ahí la importancia de iniciar un cambio a nivel educativo. 

Por todo ello, como ciudadana y mujer bisexual, me dirijo a las y los miembros del Parlamento de Andalucía para que sean conscientes de la importancia de llevar a cabo este tipo de iniciativas y tomen las medidas pertinentes para ponerlas en marcha.