Hola, soy Ismael, tengo 24 años y estudio trabajo social en la Universidad Complutense de Madrid. Tengo una enfermedad rara (Charcot-Marie Tooth), por la que me operaron de la espalda por escoliosis y también tengo TOC. El principal problema que sufrimos las personas con discapacidad en el sistema educativo es la falta de accesibilidad. Y uno de los sectores en los que más nos influye es en el universitario y educativo, lo cual es muy frustrante y nos dificulta la vida.

Desde las primeras etapas ya sea en la universidad u otros ámbitos estudiantiles, suelen haber problemas para las personas en situación de discapacidad. Tanto que prácticamente se nos expulsa del sistema, lo cual nos dificulta el acceso al mundo laboral. Muchas veces también en las universidades la única adaptación que se suele cumplir y no siempre, es la del tiempo extra en los exámenes, lo que a la gente le cuesta mucho entender. Y siendo el resto recomendaciones a criterio del profesorado.

Para las personas, por ejemplo, con una discapacidad visual, no suele haber materiales adaptados y, los que hay, no suelen funcionar. Las personas con discapacidad auditiva suelen encontrar problemas por falta de bucles magnéticos o falta de educación en lengua de signos entre otras circunstancias, todo esto supone que en muchos casos se generen dificultades para seguir las clases. Y cuando por temas médicos faltamos a una clase y no tenemos los apuntes, las universidades recurren a un sistema de voluntariado en el que se supone que los compañeros prestan los apuntes, pero no siempre pueden o quieren hacerlo, por lo que no es un sistema nada amigable para nosotros.

En mi caso vivo en Guadalajara y estudio en Madrid, por lo que cada día tengo cerca de 4 horas de viaje en un transporte público no demasiado eficiente, lo que me conlleva un muy considerable desgaste traducido en ansiedad y dolor. No todo el mundo podemos permitirnos el transporte privado para ir a la universidad. De hecho, no podría realizar el recorrido a la universidad si necesitara silla de ruedas ya que por ejemplo Avenida de América no es accesible. Además, muchas universidades son como una absoluta gymkana en lo que a accesibilidad se refiere. Las becas, como la beca de inclusión de la Reina Letizia nos facilitan el acceso a la universidad, pero al ser a través de la sede electrónica, la cual no tiende precisamente a ser estable y requerir justificar hasta la única coma, a muchos de nosotros se nos hace muy difícil poder acceder y los requisitos son una locura. Además, tenemos que pagar, por ejemplo, el dinero del alquiler antes de recibir la beca y muchos no podemos hacerlo. 

Por todos estos motivos, la tasa de personas con discapacidad en las universidades es muy baja. Y, por otro lado, la tasa de las personas del colectivo que terminan los estudios es aún más baja, lo cual no es extraño por todos estos inconvenientes. Definitivamente hay que hacer una mejora general de la accesibilidad en las universidades y ámbito educativo, por eso quiero dirigirme a la Asamblea de Madrid. En recursos, transporte, a nivel educativo… Parece que cuantos menos recursos tenemos, menos posibilidades tenemos de poder estudiar. Y es cansado tener que estar siempre peleando para que las cosas sean más accesibles y poder tener los mismos derechos que los demás. Hay que perfilar bien todos los detalles y trabajar en la inclusión real de las personas en situación de discapacidad en el ámbito educativo.