Soy Johan Sebastián Beltrán o, como algunos me llaman, el Dr. S. Soy psicólogo y me dedico todos los días a que los niños y adolescentes sean felices. Con este propósito en mente llevo 8 años trabajando con población vulnerable, específicamente primera infancia, niños, niñas y adolescentes. Además de hacer un acompañamiento psicológico a los niños, también oriento y acompaño a sus familias. 

Aunque me dedico a la salud mental y el bienestar emocional de la primera infancia a nivel laboral, también soy voluntario en varios proyectos enfocados en los niños en temas como, por ejemplo, la explotación sexual comercial, la construcción de proyectos de vida por medio de la música y el arte, y la lucha por la paz. 

Estos años de acompañamiento me han llevado a entender la importancia de la salud mental en la población infantil. Por esto, creo que es indispensable que ellos gocen de entornos seguros y protegidos, pues estos son garantías para su bienestar y salud emocional.  Contrario a lo que algunos puedan creer, las alteraciones emocionales no solo ocurren en adolescentes y adultos. También afectan a los niños. Para prevenir esto, es importante identificar factores de protección y de riesgo.

Algunos ejemplos de factores de protección son una comunicación activa en las familias, realizar actividades para el fortalecimiento de potenciales, tener espacios seguros que garanticen el bienestar de los niños, entre otros. Por otro lado, algunos ejemplos de factores de riesgo son la exposición a situaciones de peligro, contextos difíciles y hostiles, falta de comunicación en la familia, abandono, falta de espacios lúdicos, recreativos y deportivos, y otros. 

Teniendo estos factores en consideración, es crucial priorizar la salud mental de los niños. La calidad de vida y el bienestar emocional son supremamente importantes en cada ciclo de vida; sin embargo, el acompañamiento y la orientación por parte de padres y cuidadores desde los primeros años de vida en relación a los factores de riesgo y protección son determinantes en la primera infancia y pueden ser predeterminantes para la calidad de vida en el adulto. 

Cuando uno hace ruido algo está cambiando. Hagamos ruido para que los niños y adolescentes del país sean felices. Ayúdame a concientizar sobre la necesidad de priorizar la salud mental infantil con tu firma. Si llegamos a 350 firmas, se presentará una petición a los miembros del Congreso para que nos den una respuesta. Difunde y comparte esta campaña con tus contactos. ¡Muchas gracias!

Aldeas Infantiles SOS patrocina esta petición. En nuestra organización buscamos fortalecer las capacidades de las familias para la protección, cuidado y crianza de las niñas y los niños y apoyar a los jóvenes que han perdido el cuidado de sus familias y ahora están en proceso de independización para que logren sus metas.