Pregunta para Congreso de la República de Colombia
¿Qué espacios pedagógicos está creando el Estado para prevenir a las niñas sobre violencia de género de manera que ellas tengan herramientas para empoderarse y tomar conciencia sobre su cuerpo desde la niñez?
Mi nombre es Luz Lizarazo y soy una artista visual radicada en Bogotá, Colombia. Hace poco creé una serie llamada “Soy Las Niñas” que empezó con un primer trabajo llamado “Soy Las Niñas sin Ejército”. El origen de esta obra se basa en el hecho que ocurrió el pasado 21 de junio de 2020 cuando una niña embera chamí de once años de la comunidad Gito Dokabú, fue secuestrada y abusada sexualmente por siete soldados del Batallón de San Mateo en Risaralda. Este crimen me movió a levantar la voz y decir, a través del arte, que estas cosas no se pueden olvidar. No se puede olvidar que esta niña fue violada por 7 soldados y tampoco se puede olvidar ninguna de los abusos sexuales y violencias de género que sufren las niñas de nuestro país a diario.
Activé la obra invitando a mujeres de todas las edades en estado de vulnerabilidad al Museo de Arte Moderno de Bogotá, el MAMBO, para ver la denuncia de mi obra de “el exceso de violencia en contra de las mujeres en Colombia y alrededor del mundo, por medio de una amarga reflexión sobre los excesos de la violencia social, política y cultural que aflige a la sociedad contemporánea”, como lo dice Eugenio Viola, curador jefe del museo. Allí, pusimos afiches de la obra en la calle para que la gente los interviniera: desde mujeres hasta niñas y hombres. Y sí, efectivamente cuando estas personas se pudieron acercar a un muro y escribir una frase que tenían en su corazón para que todo el mundo la leyera, presenciamos un acto de sanación.
Para mí la niñez es muy importante porque es durante la niñez que recibimos toda la información a nivel de conciencia, física y emocional para ser los adultos del futuro. Por esto yo siempre hago esta pregunta cuando hablo de mi obra: “¿Qué adulto va a ser esta niña abusada sexualmente a sus 11 años por 7 hombres?”. Por esto es tan crucial la protección de la niñez colombiana. Todas las mujeres adultas fuimos niñas en algún punto y fue en esta etapa en donde más protección necesitamos. De esta forma, mi obra no solo está dirigida a las niñas, si no a todas las mujeres que alguna vez lo fuimos.
Esta serie ha sido muy importante porque ha movilizado no solamente a mujeres, sino también a hombres que han sido conmovidos por la obra. He vivido con esta obra la importancia y necesidad de tener un espacio para que las personas se expresen y para hablar sobre la violencia de género. Tenemos que hablar y no dejar de hablar hasta que nos volvamos tremendamente incómodas y se vuelva un tema del que no se pare de hablar, pues la solución para la violencia de género sigue estando muy lejos.
Además, lo bonito de esta obra es que a partir de ella diferentes asociaciones me invitaron a hablar sobre las niñas y el estado de vulnerabilidad. Por ejemplo, la Fundación Niñas Sin Miedo, una ONG que busca empoderar y fortalecer a niñas y adolescentes colombianas para prevenir la violencia sexual y el embarazo no planeado en menores, me invitó a pasar una Mañana Sin Miedo. Imprimieron la imagen de “Soy las niñas” para que las niñas las intervinieran. Ese día fue bastante conmovedor porque vi cómo una fundación que trabaja con las niñas hace que ellas tengan pensamientos e ideas propias sobre sus cuerpos y sus derechos. La mayoría de las frases que escribieron las niñas eran muy empoderadoras, como por ejemplo “Soy dueña de mi cuerpo” o “Tengo derecho a ser diferente”.
Es importante que las niñas colombianas tengan espacios y ejercicios como estos donde puedan entender temas como la equidad de género, la violencia de género y sus derechos sexuales y reproductivos. El género es un tema importante y la pedagogía alrededor de este es sumamente necesaria para que las niñas entiendan los derechos de sus cuerpos y cuenten con una formación íntegra que les permita un positivo desarrollo de sus proyectos de vida. Necesitamos que el Estado provea estos espacios. ¿Me ayudas a que nos escuchen? Solamente necesitamos 350 firmas para que los políticos del Congreso nos respondan. Apoya con tu firma y difunde esta campaña. ¡Muchas gracias!