El autismo es una condición del neurodesarrollo, no tiene que curarse porque no es una enfermedad, y su espectro es tan grande que no hay dos casos iguales. Esto mismo es lo que me hubiese gustado saber desde el momento en que quise saber los motivos del comportamiento de mi hijo y que nadie me dijo, más bien todo lo contrario, me tacharon de madre exagerada por primeriza, me dijeron que tuviese paciencia, que podía tratarse de un retraso madurativo, o tal vez problemas de audición…

Darío no respondía a su nombre, no le gustaba el contacto físico, los abrazos, los besos, prefería jugar solo, que nadie le molestase y muchos menos interactuaba con otros niños de su edad, siendo el niño estigmatizado en su clase. 

Hasta que buscando por internet encontré un listado de hitos que debería hacer para su edad y de los cuales no alcanzaba hacer ninguno. Fue a partir de ese momento que mi insistencia fue al extremo y con el tiempo pude conseguir un diagnóstico principalmente por pesada. 

Es por ello que lanzo esta petición por la necesidad de visibilizar el autismo, los diferentes casos que hay para que otras personas se puedan sentirse identificadas y saber que no están solas. Un diagnóstico precoz, un diagnóstico a tiempo, puede cambiarte la vida. Tienes un nombre, una explicación a esos comportamientos, a esa forma de percibir la vida y la posibilidad de buscar los recursos necesarios para saber gestionar lo que sientes, por el bienestar como persona en el espectro y para su familia. 

Cada día se conocen más casos, muchos de ellos a larga por determinaciones erróneas. Para evitarlo, ante la más mínima duda, que se ponga en marcha un protocolo que inicie un examen exhaustivo y descarte otro tipo de patologías. 

Es inadmisible que muchos jóvenes y adultos, hayan crecido considerando que tenían un problema de salud mental, depresión, psicosis, trastornos de la personalidad y hayan acabado en derivaciones y con tratamientos inadecuados a su verdadera realidad.  

Escúchennos, necesitamos apoyo por parte de la sociedad, la sanidad y la educación en particular, porque todos los pequeños logros suman, y ante todo nosotras las madres, trabajaremos sin descanso para mejorar todos los ámbitos de la vida de nuestros hijos.