Pregunta para Congreso de los diputados
Me llamo Mari Carmen y me han denegado la pensión por incapacidad laboral 4 veces. ¿Hasta cuándo tendremos que sufrir las personas con discapacidades crónicas las prácticas de los tribunales médicos?
Soy Mari Carmen, tengo 48 años y soy enferma crónica. Tengo fibromialgia, soy asmática y tengo enfermedad inflamatoria intestinal. Además, tengo déficit funcional, no puedo casi andar, estoy operada de las lumbares, tengo fibrosis post quirúrgica, atrapamiento de nervios (raíz S1) a causa de la operación y el pie izquierdo equino caído. Lo llaman síndrome de la espalda fallida, cosa que no tiene solución y me tienen que tratar en la unidad del dolor. Llevo artrodesis, el cuello para que me operen y tengo problemas para sedestación y bipedestación (para estar sentada o de pie, durante mucho tiempo). Si esto fuera poco, sufro de problemas de mucha ansiedad, problemas de memoria por la medicación -tomo oxicodona, entre otros tratamientos-, o bien tengo mucha lucidez, no hablo durante todo el día o repito las cosas muchas veces. Por culpa de lo que me están haciendo los tribunales sufro de depresión doble.
No es solo que todo esto, por ley, merezca pensión, es que lo que están haciendo desde los tribunales médicos es inaceptable. La pensión por incapacidad total -no absoluta- que recibí durante 3 años, la gané en los tribunales, yendo a juicio. En ese tiempo empeoré y me tuvieron que operar otra vez. En ese momento, cuando estaba en el hospital, se estaba celebrando el juicio por mi pensión -había hablado ya con el perito médico que me mandó el juzgado a casa, quien me dijo que estaba para que me darían la absoluta-. No pude ir al juicio por estar ingresada y me informó mi abogado diciendo que me quitaban la pensión porque consideraban que era apta para el trabajo.
Los informes médicos recibidos son suficientes para determinar que mi estado es grave, que no tengo solución y que lo mío es crónico. Aun así, con los informes en la mano, el tribunal médico me ha echado 4 veces para atrás mi pensión por incapacidad laboral, mandandome a trabajar de guardia de seguridad o control de accesos. En ese trabajo tendría que abrir portones, hacer fuerza, coger mesas y sillas, preparar salas, subir y bajar escaleras, protegerme del riesgo de hurtos… Me es imposible trabajar. Necesito hacer mi vida, poder pagar la casa y la comida. Yo querría trabajar, de verdad, sentirme útil, pero en mi estado no me es posible. Necesito fisioterapia y asistencia para poder llevar la casa porque soy dependiente, si intento barrer la casa, por ejemplo, tengo que estar acostada los siguientes 3 días. ¿Cómo voy a trabajar de guardia de seguridad?
Además, lo que nos dan a los/las enfermos/as crónicos/as no es ni una paga, es una limosna. Con 400 euros no nos da para vivir dignamente. A nadie le da para vivir con esa pensión, pero nosotros/as tenemos necesidades especiales que lo hacen aún más difícil sobrevivir con esa paga. No me pueden ni deben mantener mis hijos o mi pareja.
A parte del trato recibido desde las instituciones, a esto se le suman los juicios de la sociedad. La sociedad es muy injusta con los/las enfermos/as crónicos/as, no ven cuando estamos un mes en el hospital o meses en la cama sin salir. Si se nos ve un poco arregladas/os, se dice que queremos cobrar la pensión y no trabajar, y esto no hace más que agravar nuestro sufrimiento.
Quiero subrayar que en los tribunales médicos nos tratan de malas maneras y no tienen empatía alguna, nos están maltratando psicológicamente. Es una vergüenza lo que están haciendo, somos muchos/as los/las damnificados/as, nos están dejando desamparados/as y estamos muriendo de dolor, literalmente. Es como darnos una y otra vez contra un muro de hormigón. ¿Hasta cuándo tendremos que sufrir las personas con discapacidades crónicas las prácticas de los tribunales médicos?