Pregunta para Cortes Valencianas
Padezco cáncer de mama triple negativo. La inversión a favor de la investigación es crucial. Además, pienso que toda prevención es poca: ¿por qué no se adelanta la edad en la que se empieza el cribaje público para la detección del cáncer de mama?
Me llamo Mariangeles y vivo en Ibi (Alicante). En verano del año pasado me empecé a sentir un poco extraña. Me notaba agobiada, pero lo asociaba al ritmo de vida y a la situación del momento. Un día, trabajando en el jardín, hice un tirón que me causó dolor. Después de unos días, palpándome, noté una parte del pecho un poco dura, y de entrada achaqué el síntoma a lo mencionado, pero dándole vueltas y hablándolo con mi familia, terminé por pedir cita al médico.
El profesional que me atendió no era mi médica de cabecera. Después de explorarme, consideró que todo estaba bien; solo me informó de que notaba que tenía las glándulas mamarias inflamadas. Igualmente, consideró pedirme cita para que me practicaran una analítica y una mamografía. Después de unos días, volví al médico para que me diera los resultados de la analítica. Esta vez ya estaba mi médica, que repitió la exploración y que sacó las mismas conclusiones que el primero.
Me llamaron para hacerme la mamografía y después de practicármela, consideraron la necesidad de someterme, también, a una ecografía mamaria. Justo después de hacerla, ya me informaron de que la lesión que se intuía tenía mala pinta. Yo, de entrada, no quería aceptar que se pudiera tratar de una complicación, pero la persona que me trataba en aquel momento ya me indicó que, según el protocolo, tenía que someterme a una biopsia del pecho y de la axila. Después de unos 10 días de hacérmela, me informaron de que padecía un cáncer de mama triple negativo “in situ” y que no había afectación en los ganglios.
Con el diagnóstico, me empezaron a hacer pruebas para asegurar que la afectación de la enfermedad sobre mi cuerpo no iba más allá del pecho. Me hicieron un TAC, resonancias de casi todo el cuerpo, me mandaron con el ginecólogo, etc. Entonces confirmaron que el cáncer estaba localizado. También me informaron de que el triple negativo es una tipología de cáncer muy agresiva, pero que a la vez, si la quimioterapia funciona, tiene muy buena respuesta.
El día 9 de septiembre de 2021 empecé con la quimioterapia. Me dieron 12 sesiones semanales y luego cuatro sesiones cada 21 días. El tratamiento funcionó. La idea era que con la quimioterapia se redujera el tamaño del tumor para después poder operar. En la quinta sesión de quimioterapia, aproximadamente, la oncóloga me exploró y ya no notó el bulto. Terminé con el tratamiento mencionado y el 13 de abril me intervinieron quirúrgicamente. En estos momentos, estoy en remisión completa y a continuación, me someteré a un tratamiento de radioterapia a modo preventivo.
Considero que toda prevención frente al cáncer es poca. A raíz de vivir mi proceso de enfermedad, me he dado cuenta de que hay muchísima gente muy joven que padece enfermedades como la mía o similares. Es en este sentido que considero que sería necesario dejar de lado las estadísticas y apostar por adelantar la edad en la que empieza el cribaje público para la detección del cáncer de mama. Un diagnóstico a tiempo es primordial. Además, considero que las instituciones deberían de mejorar la inversión que se destina a la investigación con la finalidad de avanzar hacia la curación del cáncer, pero también hacia tratamientos menos agresivos y más eficaces. Hay que ser consciente de que el cáncer está casi en todas las familias y solo con investigación se puede revertir esta situación.
Es por todo lo planteado que me dirijo a los políticos de les Corts Valencianes, ya que son quienes me representan, para que me respondan a la pregunta: La inversión a favor de la investigación es crucial para avanzar hacia la curación. Además, pienso que toda prevención es poca: ¿por qué no se adelanta la edad en la que se empieza el cribaje público para la detección del cáncer de mama?