Pregunta para Parlamento de Galicia
¿Por qué una parte del presupuesto destinado a sanidad no se invierte en la investigación del cáncer? ¿Por qué no existen ayudas económicas que sean específicas para los pacientes oncológicos?
Mi nombre es Marina y he atravesado por un cáncer de mama. La detección de mi cáncer fue un poco surrealista. Recibí la carta, que te suelen mandar cuando cumples 50 años, para ir a hacerme una mamografía. Pero el problema era que por una parte, me era imposible salir de casa y por otro lado, la fecha de la cita ya había pasado.
La verdad que lo dejé pasar. Pero un día me puse a pensar que es verdad que ya tenía una edad y que detectarme yo misma algo en el pecho era bastante difícil, ya que los tengo fibrosos. Cuando me encontré mejor le pedí cita a mi médico para poder ir a hacerme esa revisión.
Mi médico no estaba, pero me atendió una doctora. Yo no me había notado nada, pero ella me miró y me dijo que iba a pedirme cita urgente para una mamografía. Me dijo que como estábamos en plenas navidades, era 23 de diciembre, seguramente la cita iba a tardar. Yo no le di muchas vueltas, no pensé que la hubiera pedido urgente porque vio algo.
Bajé a la entrada del hospital a pedir la cita y al salir por la puerta me sonó el teléfono, era para darme esa cita. Me dijeron si podía ir ese mismo día, pero la verdad que me venía muy mal. Me dieron cita para el día siguiente: 24 de diciembre.
Fui a primera hora y al llegar vi que no había nadie más. Yo creí que por eso habían sido tan rápidos porque no tenían más citas. Me hicieron la mamografía y cuando iba a vestirme me dijeron que esperara y así me hacían también una ecografía. Estuvieron mucho tiempo haciéndome la ecografía y cuando me iba a levantarme para irme me volvieron a decir que esperara un momento, que ahora venía la doctora.
Cuando llegó me dijo que habían encontrado un bultito, pero que no me asustara que seguramente sería un quiste pero para asegurarse, y ya que estaba allí y no había nadie, que me podían hacer la biopsia. Yo le dije que me parecía bien, pero empezó a comentarme que después de la biopsia debería estar unas semanas en reposo y sobre todo sin acercarme a la cocina para que no me diera calor. Era 24 de diciembre, la cena se iba a hacer en mi casa y que la que cocinaba era yo, por lo que le dije que mejor volvía otro día. La doctora se puso muy seria y de forma muy tajante me dijo que otro día no. Fue todo tan rápido que no me dio tiempo a pensar.
Finalmente me hicieron la biopsia, que me dolió mucho. Cuando llegué a casa les expliqué a mi familia lo que había pasado Todos se volcaron mucho conmigo. A los pocos días me llamaron para darme los resultados. Fui con mi hermana porque no quería que fuese sola. Y fue ahí cuando me dijeron que era cáncer.
Me hicieron muchas pruebas para ver cómo de agresivo era el cáncer. Fue todo bastante rápido pero a la vez muy estresante. Todo había que hacerlo ya. Me dijeron que era muy agresivo. Primero tocaba operar y luego pasar por la quimio y radio. Una vez acabado ese proceso debía estar 5 años con tamoxifeno.
Fue una experiencia muy extraña porque te quedas como en stand by, no te crees lo que está pasando. Durante el proceso lo pasé mal físicamente pero anímicamente creo que no era consciente del todo, para mi lo que estaba pasando no era real.
La parte más dura es ahora, cuando ya has acabado con la quimio y la radio pero aparecen las consecuencias del tratamiento. Tengo tiroides, los dientes se me están rompiendo… Aunque lo que peor llevo es la parte emocional, es como si todo lo que no viví durante el proceso hubiera llegado de golpe. Es como si hubiera despertado de ese mal sueño. Estoy un poco de luto por la persona que fui, porque ya no soy la misma.
Creo que es fundamental que se destinen más recursos a la investigación. Tenemos unos profesionales increíbles, pero si no tienen recursos ellos no pueden seguir avanzando en la cura del cáncer. Y que a estos profesionales les lleguen esos recursos recae en la responsabilidad de las instituciones públicas.
También creo que es necesario que se destinen ayudas económicas a los pacientes oncológicos. Cuando atraviesas por esta enfermedad es muy difícil seguir trabajando o incluso cuando te has curado es muy complicado volver al mercado laboral. Creo que en el proceso del tratamiento es muy importante que los pacientes tengan la tranquilidad de que van a poder pagar sus facturas. A nosotros no nos dan nada, y muchas veces la forma que tenemos de mantenernos es gracias a nuestros familiares.
Por ello le pido al Parlamento de Galicia que de los presupuestos destinados a sanidad se destine una parte a la investigación del cáncer. Y que por otro lado, que dentro de las ayudas sociales incluyan una que sea específica para los pacientes oncológicos.